
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el dengue es una de las enfermedades tropicales más desatendidas que se ha expandido en los últimos tiempos, y cuya incidencia negativa viene agigantándose desde hace unos cincuenta años, amenazando constituirse en epidemia mundial.


En estos días no se habla de otra cosa que no sea la gripe. Escuchamos a diario la enorme cantidad de personas que están afectadas por la enfermedad. Los grupos más vulnerables son los chicos y ancianos, por estar más expuestos al cambio climático.



Desde hace varias décadas, el mosquito se ha convertido en un enemigo mortal: transmisor de enfermedades, en especial del dengue, cuyo signo de alarma general es la fiebre. Ante cualquier sospecha, la recomendación es acudir inmediatamente al centro asistencial de salud más cercano a la casa y seguir las recomendaciones del médico.

Uno de los temas sobre el cual hemos insistido mucho a lo largo del año fue la posibilidad de un pequeño vivero forestal en las escuelas y, precisamente, con este tema queremos cerrar el año; teniendo en cuenta que el próximo año las instituciones puedan empezar con un gran proyecto institucional, centrado en la creación de un vivero escolar.

A lo largo del año, a través de nuestras entregas, hemos insistido en el tema que se relaciona con la salud y el medioambiente. Entre ellos, los contenidos de salubridad, de ahí que la limpieza nunca pasará de moda, por el contrario, los tiempos en que vivimos reclaman poner mucho más énfasis a este tema.

Decíamos en una de nuestras entregas anteriores: «Para conducirnos de manera civilizada en la sociedad, no solo necesitamos conocer nuestros derechos y obligaciones que están establecidos en las normativas, sino, además, es preciso utilizar el sentido común». Este nos ayuda a conducirnos con prudencia y precaución por la vida y evitar errores.