En estos días salió a la luz pública un supuesto caso de abuso sexual sufrido por un niño de 6 años en un colegio privado, y que al parecer involucra a otro alumno de 15 años de la misma institución que habría contado con la complicidad de otros dos adolescentes. El caso fue denunciado a la prensa por allegados a la víctima, ante la inacción de las autoridades de la institución educativa.
Los 135 años que tiene el emblemático bar asunceno de la avenida España, en el barrio Las Mercedes, son suficientes para albergar gran parte de la historia de la ciudad. Tras sobrellevar una primera gran crisis derivada del “somozazo” ahora busca superar la pandemia del covid.
La detención del astro del fútbol, el brasileño Ronaldinho Gaúcho, la desaparición de la niña francesa en Emboscada, la fuga de 76 presos de la cárcel de Pedro Juan Caballero, la captura del sicario de Pablo Medina, el hallazgo de un laboratorio de droga en el penal de Tacumbú y la incautación de 2.906 kilos de cocaína en Villleta, fueron los hechos más resaltantes en el ámbito judicial-policial este año.
En un día como hoy, la desgracia se instaló en la vida de Florencia Estigarribia, para no irse más. Tras enterrar los restos mortales de su hija Felicita, de 11 años, fue obligada a dejar Yaguarón para ir a Pirayú, donde llora en silencio y con mucha impotencia de que su caso continúe impune.
Los juzgados de depuración de causas relacionadas con la pandemia ya están dictando las primeras resoluciones. Uno de los procesos en estudio tiene que ver con una boda, cuyos involucrados ofrecen G. 14 millones para cerrar el caso.
Según Liliana Zayas, viceministra de la Mujer, Paraguay no registró ni un caso de feminicidio en el mes de abril y los números de este tipo de crimen en el primer trimestre se han reducido en comparación con el año pasado.
Ella tiene 16 años y hace seis que está en un hogar capitalino. Es el tercero que le alberga, pues está institucionalizada desde los cinco años. Por su edad y una enfermedad que padece, ella es parte del grupo considerado de adopción prioritaria, debido a la dificultad de conseguir padres adoptivos. Ahora, solo la cuarentena la separa de su futura familia.
Con 82 niños (hasta 13 años) y 44 adolescentes, la directora del hogar Unidos en Cristo, Valeria Cáceres, está haciendo malabarismos para poder cubrir todos los gastos. Acusa que un error involuntario del Ministerio de Hacienda causó que en el corriente año hayan dejado de percibir la ayuda estatal de G. 200 millones que recibieron hasta el año pasado y dijo que con la cuarentena las donaciones han disminuido considerablemente