“El equipo ha tomado esta decisión debido al aumento de casos de coronavirus en la primera división rusa”, anunció el actual segundo de la clasificación en un comunicado. Hasta nueva orden, todo el efectivo profesional del Lokomotiv residirá en Bakovka, el centro de entrenamiento del club en el sudoeste de la capital rusa.
“Peleamos por los primeros puestos y la Liga de Campeones. No podemos permitirnos correr riesgos”, declaró el arquero y capitán del equipo Guilherme, citado en el comunicado. El campeonato de fútbol ruso se reanudó el 19 de junio tras el parón por la pandemia de coronavirus.
Todo el efectivo del Rostov fue puesto en cuarentena después de que seis jugadores dieran positivo, forzando al club a enviar a sus juveniles a jugar a Sochi. Tres jugadores del Dinamo Moscú dieron también positivo y su partido contra el Krasnodar fue aplazado. En mayo, cinco positivos fueron detectados en el Lokomotiv, uno de ellos el del peruano Jefferson Farfán. El Lokomotiv es segundo a nueve puntos del líder Zenit San Petersburgo.