Pero el esloveno, entre la niebla presente en la meta, logró arañar por la bonificación unos segundos más respecto al danés Jonas Vingegaard, que había asumido la responsabilidad en la subida final a Superbagnères e intentó en dos ocasiones -a falta de 4 y de algo más de 2 kilómetros, sin éxito- dejar atrás al maillot amarillo.
Lea más: Calendario de los Juegos Panamericanos Junior
El día en que se escalaron además puertos míticos como el Tourmalet, el col d’Aspin o el Peysesourde, Arensman logró su primera victoria en el Tour en su primera presencia en la ronda francesa.
“Sólo se podía ver 20 metros por delante. Pasé bastante miedo en la bajada del Tourmalet, iba detrás de Arensman y simplemente desapareció entre la niebla”, relató Pogacar.
Todos los beneficios, en un solo lugar Descubrí donde te conviene comprar hoy
Presente en la escapada formada en las primeras rampas del Tourmalet, primera de las cuatro dificultades montañosas del día, el escalador de la formación Ineos-Grenadiers de 25 años se quedó solo en el Peyresourde, y resistió la llegada de los favoritos en Superbagnères.
Evenepoel se baja del Tour
Evenepoel había protagonizado un inicio de Tour alentador. Vencedor en la contrarreloj en Caen en la 5ª etapa, abordó los Pirineos con el maillot blanco y con un retraso de un minuto sobre Pogacar y 16 segundos de ventaja sobre Vingegaard.

Pero desde la primera etapa en el primer gran macizo montañoso en este Tour de Francia el belga se vio en dificultades, distanciado desde el primer puerto el jueves, aunque aquel día logró limitar daños subiendo a su ritmo.
En la cronoescalada del día siguiente, de 10,9 kilómetros hasta Peyragudes, pareció vacío de energías y vio incluso cómo Jonas Vingegaard, que había salido dos minutos más tarde, le adelantaba antes de llegar a meta.
“No tuve la mejor preparación para venir al Tour, hice todo lo que pude pero simplemente no estaba al 110%, que es lo que se necesita en el Tour para luchar por la general”, declaró Remco horas después de su abandono.