Ante el aviso de la petrolera estatal Petropar sobre el reajuste en los precios de todos los tipos de combustibles, previsto para este jueves, cientos de automovilistas se volcaron a las estaciones de servicio durante la noche del miércoles, intentando abastecer sus vehículos antes de que entre en vigencia el nuevo incremento.
La medida implica una suba de G. 380 por litro, golpeando directamente el bolsillo de los consumidores, que ya venían sintiendo los efectos del ajuste aplicado por los emblemas privados semanas atrás, con aumentos que llegaron hasta los G. 850 por litro.
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Gobierno había promovido a Petropar como alternativa
En aquel entonces, el Gobierno había minimizado el impacto de estas subas, destacando que Petropar mantenía sus precios. Incluso, los ministros Carlos Fernández Valdovinos (Economía) y Javier Giménez (Industria) alentaron a la ciudadanía a optar por la estatal como alternativa.
Sin embargo, ahora Petropar también ajusta sus precios, lo que representa un nuevo revés para los consumidores, en un contexto económico que ya muestra signos de presión inflacionaria.