El niño de “los cachetes más famosos del mundo” entretuvo con sus ocurrencias, su inocencia y sus frases como “chusma... chusma...” y “dale sí, no seas cobarde”.
Acompañado de un presentador, ofreció un sketch en el que juega con el no saber hacer nada, tratando de tocar la guitarra y cantar la “Malagueña”. También se pone a la búsqueda de una mamá y un papá paraguayos, haciendo subir al escenario a un hombre y a una mujer del público e invitándolos a bailar.
Durante 40 minutos Villagrán demostró que su capacidad para dar vida a Kiko sigue casi intacta y, tal como la serie que lleva 44 años en el aire, sigue divirtiendo a todos. También recordó a sus compañeros “que ya no están”, desatando fervorosos aplausos.
La apertura del show estuvo a cargo del mini-Michael Jackson paraguayo, Ricardito Fariña, que conquistó al público bailando al estilo del “rey del pop”. También subió al escenario el baby Michael Jackson, que a sus tres años imitó pasos del cantante, enterneciendo a la gente que lo ovacionó.
Todos los beneficios, en un solo lugar Descubrí donde te conviene comprar hoy
Tras el show, Villagrán recibió la distinción de “Visitante ilustre”, otorgada por la Junta Municipal de Asunción, y otro reconocimiento por parte del Cuerpo de Bomberos Voluntarios del Paraguay, los cuales agradeció emocionado. Con presentaciones en Pedro Juan Caballero y Capitán Bado, el artista culminó ayer la gira que realizó, desde el pasado fin de semana, por varias ciudades del país.
malonso@abc.com.py