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En un bien logrado ensamble, el trío conformado por Chucho Navarro Jr., Misael Reyes y Eduardo Beristáin ofreció un recorrido por ese valioso legado de clásicas canciones que les dejó el trío original, formado hace 74 años en la ciudad de Nueva York.
Con bastante puntualidad, los músicos se hicieron presentes en el escenario al son de “Contigo”, para luego pedir “Una copa más”, que contó con un destacado solo de trompeta.
“Amorcito corazón”, “Rayito de luna” y “Sin un amor” también aportaron su cuota de romanticismo a la noche, antes de dar paso a la clásica “Bésame mucho”, que fue muy aplaudida por el público presente.
“La múcura” llegó cargada de ritmo, antes de volver a los boleros con la recordada “Historia de un amor”.
Bien afinado y correcto, Reyes lleva la voz principal del trío, mientras que Beristáin se destaca con el requinto. Por su parte, Navarro se encarga de acompañar con la guitarra y poner su voz como solista en algunos tramos de las canciones.
En el repertorio también estuvieron presentes el vals peruano “Alma, corazón y vida”, el bolero “Sabor a mí” y el cha cha chá “Quizás, quizás, quizás”, que fueron muy celebrados por los presentes.
La orquesta de 72 músicos, dirigida por Juan Carlos dos Santos, contó con precisos arreglos realizados por Rodrigo Quintás, especialmente para estas presentaciones.
“Sin Ti” y “Me voy pa’l pueblo” sonaron un poco antes del cierre, mientras el público seguía con ganas de más. Así fue que como broche final llegaron las guaranias “Recuerdos de Ypacaraí” y “Mis noches sin ti”, que contaron con arreglos de Remigio Pereira.
Lastimosamente, la cantidad de público fue escasa. No obstante, los presentes demostraron su aprecio por la calidad del espectáculo con sus efusivos aplausos.