El clásico de barrio Obrero

Desde que Sol de América abandonó barrio Obrero, para trasladarse a Villa Elisa, el partido entre Cerro Porteño y Nacional adquirió el rótulo de único clásico de ese distrito debido a la ausencia, en esa zona, de otro conjunto que milite en primera división.

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 Cerro Porteño hizo su debut en los torneos de la Liga Paraguaya de fútbol ganando en forma invicta el campeonato de 1913 cuando apenas transcurrieron 10 meses de su fundación. Por entonces, Nacional ya se había adjudicado los campeonatos de 1909 y del 11 y mantenía la misma base de esas conquistas. El Ciclón en su primer partido en la división privilegiada enfrentó y goleó a los tricolores, por 5-0, con tantos de Martín Carvallo, y los hermanos Lázaro (2) y Damaso Ávila (2). Fue un resultado sorpresivo teniendo en cuenta los quilates que poseía el conjunto albo, y con esa victoria el Azulgrana avisaba que sería gran protagonista en el futuro.

El Ciclón, “2”. En 1918 nace la segunda versión del mote de “Ciclón” para los cerristas luego de que superara a Nacional en la final de ese campeonato en tres cotejos extras. En 1915 después de que Cerro ganara a Olimpia el título en un partido definitorio por 7-4, y en tiempo de adición, nació por primera vez ese apodo para el club azulgrana.

En el año 18 quedaron empatados Cerro Porteño y Nacional en 21 puntos y definieron el campeonato en tres partidos. En los dos primeros empataron 1-1 y 1-1. En la finalísima jugada el domingo 26 de enero de 1919 venció Cerro 4-2 en gran remontada. La Academia se imponía fácilmente por 2-0 a falta de 15 minutos para que concluyera el encuentro cuando se produjo la reacción cerrista, anotando cuatro goles consecutivos en solo 12 minutos. Allí surgió la segunda versión de “Ciclón” para los azulgranas.

Nace “La Academia”. En 1924 tuvo su advenimiento el inmortal apelativo de “La Academia” para Nacional. El Tricolor ganó el campeonato de ese año sustentado por un equipazo con jugadores de la talla del arquero Modesto Denis, José León Miracca, Francisco Aguirre, el capitán y a la vez entrenador (como se destilaba en aquella época) Manuel Fleitas Solich, Bartolomé Brizuela, los hermanos Fulgencio y Pasiano Sosa Urbieta, Julio Ramírez, Carlos Munt y Enrique Erico, hermano menor del gran Arsenio. El conjunto albo dio la vuelta olímpica del año 24 justamente ante Cerro Porteño, al superarlo por 3-0, el domingo 24 de setiembre en Para Uno, con goles de Ramírez, dos veces, y de Aguirre. Esa tarde el arquero nacionalófilo Denis detuvo un penal al cerrista Capdevila cuando estaba el marcador en blanco.

Erico es campeón. Casi al final de la primera rueda de 1942 Nacional tuvo la posibilidad de repatriar a Arsenio Erico, atendiendo una pausa en el fútbol argentino, ya que el jugador era integrante del equipo de Independiente de Avellaneda. El jueves 4 de junio el gran Arsenio llegó al país y el martes 9 su ficha fue registrada en la LPF a favor del Albo. El domingo 21 de junio, en la disputa de la novena y última fecha de la rueda inicial, se produce el retorno del gran Arsenio a La Academia. Fue en el partido que Nacional enfrentó y ganó a Libertad, 2-1, en cancha de Olimpia. Al final del campeonato terminaron igualados Cerro y Nacional con 26 unidades. La Liga estipuló la realización de dos encuentros extras entre nacionalófilos y azulgranas para determinar al campeón.

En el partido de ida ganó el Tricolor por 3-0, en el estadio de La Liga, y Erico fue autor de un tanto.
La inclusión de Arsenio en el equipo albo motivó la protesta de los cerristas, que reclamaron los dos puntos perdidos, argumentando que un mismo jugador no podía fichar por dos clubes en una misma temporada. Luego de muchas y turbulentas reuniones, el Tribunal de Justicia determinó que se mantenga el resultado a favor del Tricolor argumentando que ese reglamento solo debía ser aplicado para los equipos participantes del torneo local. Disconforme con el fallo Cerro Porteño se retiró del campeonato, suscitando los más diversos comentarios entre los aficionados. Erico de esa manera daba por primera y única vez la ansiada vuelta olímpica con su amada Academia.

Fuera de la Copa. En la temporada de 1969 Guaraní obtuvo el campeonato mucho antes de concluir la competencia y Cerro Porteño y Olimpia emprendieron la carrera por la obtención del vicecampeonato que daría a uno de los dos clubes el pase a la Copa Libertadores acompañando al Aborigen. Faltando una fecha para la conclusión del torneo, Nacional con un equipo lleno de debutantes venció al Ciclón por 2-1, en Para Uno, sacándole toda posibilidad de alcanzar la segunda posición. Los dos goles de La Academia fueron obras de Celso Báez, quien justamente hacía su estreno esa noche en la división principal.

El Ciclón a la final. En el campeonato de 1995 Cerro Porteño obtuvo su pase a la final de la competencia superando a Nacional en dos cotejos en la etapa semifinal. El Azulgrana triunfó por 3-2 en la ida y 2-1 en el cotejo de vuelta. Sin embargo el equipo cerrista claudicó en la final ante Olimpia.

Insólito festejo. En la 22ª y última ronda del torneo Apertura del 2011 Nacional y Olimpia llegaron a esa ronda definitiva peleando palmo a palmo el cetro del campeonato; los albos con 44 puntos y el Decano con 42. Olimpia debía enfrentar a 3 de Febrero en Ciudad del Este y el Tricolor al Ciclón en la Olla azulgrana.

Ambos partidos se jugaron en horario simultáneo y al término de las primeras etapas, ganaba el franjeado en el Este 1-0 y en barrio Obrero empataban sin abrirse el marcador. Con ese resultado igualaban ambos en 45 puntos y no había campeón. Sin embargo sobre los 9 minutos de la complementaria Cerro llega al gol por intermedio de Francisco García y con ese resultado el Decano se consagraba monarca del torneo.

Lo que ocurrió posterior al tanto azulgrana fue lo más extraño que ocurrió en nuestro fútbol, ya que García, al darse vuelta para festejar su gol, no encontró a ningún compañero para compartir y, es más, algunos hasta llegaron a reprocharle al goleador, mientras la hinchada cerrista acompañaba con un cerrado silbido, en vez de gritar la conquista. Por fortuna para García, Olimpia perdió 3-2 y el Albo dio vuelta el marcador, anotando dos tantos, para dar la vuelta olímpica.

lirala@abc.com.py

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