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Las únicas interesadas, Tigo y Claro, ofertaron, curiosamente, por diferentes subbandas, con lo cual se quedarán cada una con 30 MHz.
Ayer el directorio del ente se reunió de forma extraordinaria para emitir la resolución por la que adjudica la licitación. Las telefónicas adelantaron US$ 30 millones. Luego desembolsarán lo restante. Cada una abonará al Estado US$ 45 millones (US$ 90 millones), que irán a parar a Hacienda para cubrir el déficit fiscal.
De acuerdo al detalle técnico, la mayor operadora del país, Tigo, prestará servicio en diez departamentos: Cordillera, Canindeyú y Alto Paraguay (subbanda G); Central, Concepción, Caaguazú, Amambay y Boquerón (subbanda H); Guairá y Ñeembucú (subbanda I).
Mientras, Claro se atribuyó siete departamentos: Itapúa y Presidente Hayes (subbanda D); Caazapá, Misiones y Paraguarí (subbanda E); San Pedro y Alto Paraná (subbanda F).
En ocho meses las operadoras deben estar comercializando el servicio de internet de alta velocidad. Deberán instalar además ocho cuentas de acceso gratuito a internet en varias zonas.
Recordemos que Claro debe limpiar la banda D que explotaba Copaco. Afecta a Itapúa y Presidente Hayes.