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Faltarían cerca de dos metros de crecida para que el río afecte una de las tres tomas de agua cruda ubicadas en Viñas Cue, que impulsan el vital líquido hacia la planta de tratamiento, según lo informado ayer en conferencia de prensa. No obstante, aún si eso llegara a ocurrir, la Essap utilizará la segunda toma de agua, que puede hacer el mismo trabajo que la primera, sin que se perjudique el servicio.
En cuanto a localidades del interior, Sarubbi hizo referencia a la planta de tratamiento de Alberdi, en donde el inconveniente se da por el corte de la ruta y la imposibilidad de proveer insumos químicos.
Pero eso ya fue solucionado con la utilización de barcazas, para trasladar el sulfato de aluminio, cal y cloro, apuntó.
En el caso de Villarrica, dijo que se están preparando bases de prevención en caso de que el río Tebicuarymi siga subiendo. Además, se está “en alerta permanente” para utilizar barcazas para el traslado de insumos.
Sobre la planta de Pilar, en donde habían declarado “alerta amarilla”, el titular de Essap dijo que ahora están en “alerta verde”, ya que el peligro fue despejado tras construir un muro de contención.
Informó que en Puerto Antequera, los usuarios no tienen inconvenientes en cuanto a la provisión de agua, ya que los técnicos crearon un nuevo portón que sirve como base de la bomba para extraer el vital líquido.
Nivel del río se estancó
Ayer amaneció estacionado en 61,75 metros el nivel del río, en la cota verificada por la Essap. Según los datos, se registró un crecimiento de 6,70 metros de febrero hasta la fecha.
Hay 8.000 afectados
Entre 7.000 y 8.000 usuarios de Essap fueron afectados por la crecida del río, por lo que suspendió la facturación a 5.000 de ellos, según datos oficiales. Son ribereños que dejaron sus viviendas, principalmente de las zonas de Chacarita, bañados Norte y Sur; que están recibiendo servicio de la aguatera, en coordinación con Emergencia Nacional.
La pérdida económica de Essap hasta la fecha ronda los G. 300 millones, de acuerdo con lo informado ayer.