Cargando...
El proyecto costaría tres veces más que la estimación que hizo Industrias Metalúrgicas Pescarmona SA (Impsa) en 1988.
El costo inicial, según Impsa, era de US$ 240 millones; en 2006, incluso según el actual y entonces director de la EBY, Ángel María Recalde, trepó a US$ 420 millones para rondar hoy los US$ 600 millones, pero que sería “mucho menor” por “la gran competencia que existe”, según declaró el martes últimos luego que la ministra de Hacienda, Lea Giménez lo recibiera en audiencia en su carácter de delegado paraguayo ante la Comisión mixta paraguayo/argentina del río Paraná (Comip), que tuvo a su cargo el estudio del proyecto Corpus, con sus tres posibles emplazamientos, y de la presa Ita Corá Itatí, aguas abajo de Yacyretá.
¿Quién pagará los US$ 600 millones? Argentina, debido a su crítica situación actual, no podrá avalar siquiera los préstamos que pretenda la EBY.
“Sería financiado con recursos propios de la entidad” repitió ayer Recalde. O sea, lo pagarán el consumidor paraguayo, cuya demanda es cada vez mayor, y el argentino, a través de la tarifa de Yacyretá.