Senavitat paga seis veces más por casa “económica”

La Secretaría Nacional de la Vivienda y el Hábitat (Senavitat) paga G. 68 millones al constructor de una casa económica, pero al contratar intermediarios “técnicos” termina abonando G. 450 millones, denunció la Mesa de la Construcción de UIP, que reúne a 13 gremios del rubro.

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Los empresarios de esta Mesa Sectorial, dependiente de la Unión Industrial Paraguaya (UIP), se reunieron esta semana con la directora de Administración y Finanzas de Senavitat, Arq. Cristina Quiroga, y en el encuentro le expusieron varios cuestionamientos a la institución.

Uno de los puntos más atacados fue el Servicio de Asistencia Técnica (SAT), conformado por empresas con las que la secretaría terceriza funciones, como la gestión de recursos ante el Fondo Nacional de la Vivienda (Fonavis).

Los representantes de gremios consideran que esta instancia, cuyo mecanismo de contratación no es transparente, debe suprimirse, porque acentúa la corrupción y genera sobrecostos, según dijeron.

Manuel López Cano, presidente de la Cámara Paraguaya de la Construcción (Capaco), señaló que por medio del Fonavis realizan adjudicaciones “que no están llevando hacia adelante el combate a la corrupción”, como pregona el Gobierno, ya que cualquiera puede ser parte del SAT.

Reiteró que el SAT no está formado por técnicos reales, sino más bien son “simples intermediarios” que “solo encarecen las viviendas”, opinó: “después vienen las viviendas abandonadas”.

A su turno, Pedro Duarte, del Centro de Contratistas Eléctricos, dijo que Senavitat licita una vivienda económica por G. 68 millones, pero el costo total, en realidad, trepa a G. 450 millones, por el pago extra a este “servicio técnico”, es decir, “se abona más por la intermediación que por la obra”.

A su vez, Jorge Regueiro, de Capaco, afirmó: “Nosotros creemos que el SAT se creó directamente para saltar la 2051 (Ley de Contrataciones Públicas)”. Para la presidenta de la Asociación de Arquitectos, María Luz Cubilla, “el SAT hace que se prostituya el tema (de la entrega de viviendas)” ya que para realizar esa función se creó la Senavitat. “Es un manoseo al trabajo del profesional. Tenemos que tender a acabar con esa intermediación”, puntualizó.

La Arq. Quiroga, de Senavitat, dijo que seguirán con el SAT, porque para eliminarlo “hay que cambiar la ley”, aunque aseguró que ahora hay más exigencias a las firmas que prestan este servicio tercerizado.

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