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CONCEPCIÓN (Aldo Rojas Cardozo, corresponsal). Ante una gran cantidad de fieles el responsable de la iglesia católica en esta parte del país señaló que hasta pareciera normal y justificado el robo. “Se dice que uno roba porque es pobre para salvar a la familia, el honor, las deudas o como forma de compensación porque a mi me roban, entonces también yo robo. Con lo robado muchas veces se quiere hacer el bien y hasta se colabora con la iglesia con lo robado”, expresó.
Indicó que se tiene en nuestra sociedad el flagelo de la búsqueda del poder, la codicia, la avaricia, la vanidad con el ropaje de servicio, muchas veces se busca ubicarse en los estratos de poder, pero al final termina sirviéndose a sí mismo para amasar fortuna, para facilitar los negocios e intereses personales o de grupos. “Lastimosamente de este modo nuestra política se corrompe”, señaló.
En otro momento, el obispo Cabello Almada preguntó a los secuestradores dónde están como ciudadanos y como hijos de Dios. “A los que se dedican a privar de la libertad al hermano. A los secuestradores, ¿ dónde estás, querido hermano? Tú que has violentado, has pisoteado los derechos de tu hermano, de la sociedad”, indicó. También se refirió con las mismas preguntas a los que han pecado solo por conseguir dinero, más tierra y van pisando los derechos de los campesinos y de los indígenas.
Por último, indicó que todos tienen derecho a respirar aire puro, pero nuestro país esta desforestándose cada vez más, “vamos perdiendo la naturaleza creada por Dios”, señaló el obispo Cabello.