El globo estratosférico que fue bajado en nuestro país ayer y que causó sorpresa a los que lo veían fue lanzado junto con otros desde Puerto Rico y navegó en la estratosfera desde allí, cuando por algún motivo que podría estar relacionado a las corrientes de aire o la rotación de la tierra, se lo tuvo que aterrizar en la zona de General José Eduvigis Díaz en Ñeembucú, con ayuda de las autoridades locales.
Dicho instrumento cumplía con vuelo de prueba, no funcionaba aún como un aparato que brindaba internet, explicó una vocera de la empresa Google, que tiene su sede central en Estados Unidos.
En principio se creyó que el aparato había caído, pero luego se confirmó que su aterrizaje fue coordinado y controlado. “El globo no cayó, fue descendido con ayuda de las autoridades del tráfico aéreo”, informó a ABC Digital una representante de la referida compañía.
Desde la oficina de Google en Buenos Aires, Florencia Sabatini explicó: “El descenso de este globo fue previsto en el marco del Proyecto Loon, que busca llevar internet a áreas remotas y rurales alrededor del mundo. El globo que aterrizó esta mañana había concluido con éxito un vuelo de prueba. Su aterrizaje fue coordinado con la autoridad de control de tráfico aéreo local, y finalmente conseguimos realizar su lento descenso en una zona rural cerca de General José Eduvigis Díaz”.
Todos los beneficios, en un solo lugar Descubrí donde te conviene comprar hoy
Conectividad
El programa Loon que mencionó Sabatini tiene tres años de creación, es una iniciativa de Google que pretende brindar conectividad a internet a zonas remotas de la tierra, lugares a los que usualmente los servicios son muy básicos o inexistentes.
Este emprendimiento está basado en una red de globos estratosféricos conectados por medio de una señal desde un sitio de la tierra. Las pruebas de conectividad de internet se realizan por medio de teléfonos celulares. La velocidad de internet a la que se accede es similar a la de 4G , afirman.
Los globos vuelan a una distancia dos veces superior a la de los aviones comerciales y cuando deben ser descendidos se toman las precauciones para que no afecten a los mismos. Constan de tres partes: La envoltura, los paneles solares que la hacen autosustentable, y el equipamiento electrónico que consiste en radios y antenas que se comunican con la tierra y entre los globos, más una computadora de vuelo y un sistema de altitud que permite hacer descender a la unidad de manera segura.
En el caso de los globos del Proyecto Loon se utiliza un plástico muy fino, de un grosor aproximado de 3mm, aparte cuenta con un envoltorio que es a prueba de la presión, lo que le permite flotar por un tiempo muy superior al de otros que se estiran a medida que se inflan. Los mismos tienen un diámetro de 15 metros cuando están totalmente inflados, pero no se inflan completamente hasta que hayan alcanzado la “altitud de crucero” en la estratosfera.
Este aparato sería útil también para las comunicaciones en casos de catástrofes naturales, dice Google.