Indígenas insisten en devolución de sus tierras ancestrales en el Chaco

En el reciente encuentro de indígenas de la nación Ishir o Chamacoco, realizado en Puerto Pollo, distrito de Bahía Negra, los líderes reclamaron la devolución de unas 9.500 hectáreas de tierras ancestrales que hoy se encuentran en manos de ganaderos. Denunciaron además la actitud poco seria de los responsables de la Secretaría del Ambiente (Seam).

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PUERTO POLLO, Distrito de Bahía Negra (Carlos Almirón, corresponsal). Durante el encuentro de indígenas de la nación Ishir o Chamacoco, se denunció que las autoridades de la Secretaría del Ambiente (Seam) supuestamente realizaron una audiencia pública para otorgar licencia ambiental para el incentivo de la actividad ganadera en la zona, lo que significaría, según los Yshir, la destrucción de unas 4.000 hectáreas de bosques de las tierras que reclaman como suyas. En esta comunidad viven unas 22 familias de los Yshir, y la propiedad, de 918 hectárea, pertenece a un particular de nombre Blas Gadea Martínez.

Según la denuncia presentada en la Fiscalía de Delitos Económicos por parte de representantes de la ONG Tierra Viva, que asesora a los indígenas, la Seam ya otorgó la licencia ambiental de esta propiedad para un proyecto de actividad ganadera sin tener en cuenta que dentro de la fracción existe toda una población.

El asesor jurídico de la ONG, Abog. Ireneo Tellez, dijo que la Seam otorgó la licencia ambiental en el marco del expediente Nº 181.187, proyecto de actividad ganadera, en el lugar denominado Bahía Negra Poty, de este distrito y que en la realidad no es otra que esta tierra de Puerto Pollo.

En tanto que el otro sector de tierras que reclaman los chamacocos es la denominada como Puerto Ramos, de unas 8.500 hectáreas, propiedad de la empresa Para Verde SRL, cuyo representante legal sería un ciudadano de origen turco, a quien lo conocen solo por su apellido, Mustafá.

Los dueños de esta tierra pretenden incentivar la actividad ganadera en el sitio, y a este efecto autoridades de la Seam hicieron la audiencia pública en cuestión en el local de la Municipalidad de Bahía Negra, donde expusieron el proyecto presentado por la firma.

Para el líder indígena de la comunidad de Puerto Diana, Estanislao Báez, no se trató de una audiencia, sino solo de presentación de un proyecto, en el cual se pretende deforestar unas 4.000 hectáreas de bosques vírgenes que se encuentran dentro de la propiedad reclamada por los indígenas como tierras ancestrales.

Minimiza denuncia

En tanto que desde la Dirección de Impacto Ambiental de la Seam, la Abog. Cinthia Gill dijo que la denuncia del líder indígena no se ajusta a la realidad, ya que en la citada audiencia pública jamás se habló de deforestación de bosques.

La letrada dijo que todo se realizó sin inconveniente alguno y que los indígenas solo reclamaban algunos sectores donde poder seguir realizando la actividad de la caza. Como el proyecto se refiere a la actividad ganadera, necesariamente se deberán realizar desmontes, sin embargo la profesional sostuvo que no necesariamente se podría dar este hecho, ya que la cría de ganado se podría realizar en áreas donde ya no existen bosques.

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