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VILLA YGATIMÍ, Dpto. de Canindeyú (Alberto Núñez, corresponsal). El desmoronamiento de la cabecera del puente se produjo en la mañana del lunes a raíz de la fuerte correntada del río Jejuimí por efecto de las intensas lluvias. Algunos lugareños montaron un improvisado y peligroso paso para personas que circulan a pie y en motocicleta.
Centenares de personas ya cruzaron por el improvisado puente que colocaron en el lugar, inclusive niños de muy corta edad. Los lugareños cobran una suma por el “servicio”.
“Nosotros estamos pasando por una situación bastante difícil en esta zona. Nos preguntamos dónde están nuestras autoridades, nos sentimos abandonados. Si estábamos en época de campaña para elecciones hace rato iban a venir”, dijo Eugenio Recalde, habitante de la zona.
Hasta ayer el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC), la Gobernación y las municipalidades de los distritos afectados se desentendieron del problema que afecta a unas 15.000 personas.
El pasado lunes, un enfermo fue rescatado por los vecinos que se arriesgaron y cruzaron con el paciente en brazos sobre la improvisada pasarela de madera para poder llevarlo a una ambulancia del Cuerpo de Bomberos Voluntarios de Curuguaty.
Por otro lado, numerosos camiones de gran porte quedaron varados a lo largo del tramo Curuguaty-Villa Ygatimí. Con ayuda de un tractor agrícola poco a poco fueron rescatados de los lodazales y pudieron retomar viaje.
El ingeniero Hugo Viñales, encargado de artes de la empresa Constructora Tecnoedil SA, adjudicada para la construcción de la ruta asfaltada tramo Curuguaty-Ypejhú, unos 88 kilómetros, reconoció que son responsables del mantenimiento de la vía. Sin embargo, aseguró que el problema de la cabecera del puente es algo irremediable y que las malas condiciones de los caminos no permiten que lleguen máquinas y camiones que transportan piedras para rellenar el lugar.