Al costado de su vivienda se acumula una gran cantidad de cubiertas de vehículos que juntan agua y que hacen propicia la procreación de mosquitos que invaden las casas vecinas, denunció Candia.
“Prácticamente en mi patio están la máquina y las cubiertas acumuladas porque el negocio se instaló en una propiedad que era de mi abuela. El olor y el humo cuando queman arrasan la casa y tenemos que estar encerrados todo el día”, expresó.
La denunciante vive a tan solo cuatro casas de la Municipalidad, donde denunció en varias ocasiones el hecho, pero no tiene respuesta de las autoridades. Dijo que también denunció el caso en la Secretaría del Ambiente (Seam), que los funcionarios verificaron el lugar y que todo sigue igual.
“El propietario de la vulcanizadora y de la gomería construyó frente a mi casa un registro de su pozo ciego y hace más de tres meses que colapsó y el agua servida llega a mi casa y hoy día no podemos salir ni entrar por este problema”, expresó Candia.
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Consultado el propietario de la gomería y vulcanizadora, Carlos Velilla, indicó que cuenta con la autorización de la Seam para operar en medio de la población y que el agua que invade la casa vecina “es cristalina, que proviene de un manantial”.
Intentamos hablar con el intendente Horacio Ortiz (PLRA) para escuchar su versión sobre el problema, pero no atendió nuestras llamadas telefónicas.