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SAN JUAN BAUTISTA DEL ÑEEMBUCÚ (Miguel Angel Rodríguez, corresponsal). La manifestación tendrá lugar sobre la Ruta IV “General Eduvigis Díaz”, en el Cruce Toledo, límite de los departamentos Ñeembucú y Misiones. El párroco de San Juan Bautista del Ñeembucú, presbítero Ismael Obregón, anunció que desde el lunes están organizando la movilización denominada “San Juan se levanta, queremos camino de todo tiempo”.
La medida de presión será encabezada por el religioso y el intendente Marcial Torres (PLRA), y cuenta con el apoyo de pobladores y las diferentes instituciones de la comunidad.
El objetivo es exigir al Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) el asfaltado de un camino de acceso de 24 kilómetros del tramo Pilar-Alberdi. También pedirán el acondicionamiento de un trayecto de 42 km que une este distrito con Cruce Toledo, sobre la Ruta IV.
“Nos estamos organizando para salir en caravana acompañados con la imagen del santo protector hasta la Ruta IV para decir ‘San Juan se levanta’ y para decir basta al aislamiento, queremos camino de todo tiempo”, señaló el religioso.
“Vamos a solicitar la presencia del ministro de Obras Públicas (Arnoldo Wiens) o de algún representante para sentarnos a dialogar y ver qué se puede hacer para tener un acceso en condiciones a San Juan del Ñeembucú”, expresó Obregón.
El enripiado en la ruta San Juan Bautista del Ñeembucú-Tacuaras, de 38,5 kilómetros y construido en el año 2014, está totalmente destruido por efecto de las inundaciones. El párroco indicó que no pidieron el arreglo o el asfaltado de esta vía porque sería más difícil realizar por la situación desastrosa en la que se encuentra.
Proceso Viciado
El concejal municipal de Tacuaras, Elizardo López (FG), manifestó que la obra de enripiado se llevó a cabo a través de un proceso totalmente viciado de irregularidades. La obra estuvo a cargo de la constructora BGF SA, que figura a nombre del arquitecto Blas Gustavo Franco y está vinculada al cuestionado senador Dionisio Amarilla (PLRA).
La obra tuvo un costo de G. 11.000 millones y fue financiada por la Gobernación de Ñeembucú siendo jefe departamental Carlos Silva (PLRA).
El concejal López sostuvo que el enripiado no se hizo de acuerdo a las especificaciones técnicas necesarias para la zona. Se construyeron solamente dos de los tres puentes de hormigón y en vez de 26 alcantarillas se colocaron apenas 10 tubos, que no dan abasto para desaguar cuando se vienen grandes caudales de agua, como ocurrió tras las torrenciales lluvias registradas en abril y mayo.
Además, el terraplén tenía que elevarse para evitar que se inunde en épocas de grandes lluvias, y tampoco eso se cumplió. La vía se cargó con tapa cantera y quedó en peores condiciones. Como consecuencia de la mala calidad del trabajo, no se puede llegar a Tacuaras desde San Juan Bautista del Ñeembucú, explicó.
Al no elevarse el terraplén, ahora se sufre la consecuencia, porque en lugar de que el agua se escurra, se encajona, se desborda e inunda el camino, y con eso Tacuaras y San Juan del Ñeembucú están aisladas.