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Gladys Cardozo, que está representada por el abogado Álvaro Arias, y Aníbal María Benítez están acusados por lesión de confianza y un presunto perjuicio de G. 2.400 millones.
El magistrado Escobar convocó a la exministra y a sus abogados por segunda vez bajo apercibimiento, y con la advertencia de ser citados a una audiencia disciplinaria si vuelve a dilatar la realización de la audiencia preliminar.
El juez indica en su providencia que ordenará la captura y dictará la rebeldía de Cardozo y el coacusado Benítez, exdirector de la Unidad Operativa de Contrataciones de la SEN, si no comparecen con sus respectivos abogados.
En el escrito, se advirtió a los acusados y a sus abogados que deben litigar con buena fe y evitar dilatar.
“Deberán litigar con buena fe, evitando planteamientos meramente dilatorios, siendo pasibles de posibles sanciones, advirtiéndose a las partes y a sus abogados patrocinantes que eviten planteamientos dilatorios que entorpezcan el normal desarrollo del proceso”, se consigna en la nueva convocatoria.
En el chicaneado proceso, el juez Escobar citó por quinta vez a los acusados en lo que va del año, mientras que el anterior juez Pedro Mayor Martínez (hoy camarista) tuvo que suspender en tres ocasiones por recursos dilatorios.
A esto se suma que el expediente original se “esfumó” de la secretaría del juzgado de manera casi inexplicable y tuvo que ser reconstituido.
La acusación por lesión de confianza fue presentada el 9 de abril de 2015 por la fiscala de Delitos Económicos y Anticorrupción Victoria Acuña, quien pide la elevación a juicio oral y público.
Según la agente, los responsables de la SEN realizaron compras sobrefacturadas de alimentos y ocasionaron un perjuicio patrimonial de G. 2.482.950.000, en los meses de marzo, abril y mayo de 2012.
Los contratos objetados fueron con las empresas María Gloria SRL –que proveyó a G. 9.100 el litro de aceite y cuya representante legal es Silvia Lorena Machuca– MyF Comercial, de María Digna Méndez Escobar, Catalina Méndez Escobar y Juan Benito Méndez; y Beltrom SA, de Héctor Romero Sánchez y Teresita de Jesús Torres.