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El problema ya es insoportable. Recurrieron infinidad de veces ante la Empresa de Servicios Sanitarios del Paraguay (Essap), pero no atiende, pese a los insistentes reclamos.
Cuando se quejan les dicen que “alguna obstrucción tiene el sistema en algún lugar”, pero no hacen nada para solucionar, lamentó José Burgos.
Justamente a una cuadra del lugar, sobre la avenida Primer Presidente, se forma un géiser de aguas negras cada vez que llueve. El agua putrefacta se escurre por Fortín Toledo, luego por Juan Ramón Céspedes y termina en un sumidero instalado en la avenida Santísimo Sacramento.
A causa de las pésimas obras encaradas por la Essap se llenan de cloaca las casas, calles y avenidas.