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El cañonero Humaitá fue botado ayer al río Paraguay, luego del trabajo de reparación que llevó a cabo la Dirección del Material (Dirmat) de la Armada Paraguaya durante 8 meses.
“Después de todas las pruebas de estanqueidad, básicamente ya no filtra el agua, ahora se quita este buque, se pone en un lugar donde se va a seguir trabajando y se va a tratar de maniobrar para que pueda ingresar el cañonero Paraguay para las mismas condiciones”, explicó Luis Vera, capitán del navío.
Indicó que la primera parte del proceso, que se concretó en la víspera, refiere a la flotabilidad del buque y que luego formarán un equipo para el museo. “Hacer un museo no es solo cargar cosas antiguas, sino que requiere todo un trabajo de museología, de manera que en corto o mediano plazo la ciudadanía pueda estar disfrutando de esto que marcó la historia del Paraguay”, indicó.
Recordó que, tras un acuerdo con la Municipalidad de Asunción, se habilitó en la bahía un museo por un tiempo, hasta que notaron que las condiciones de seguridad ya no eran propicias para las visitas. “Llegamos a recibir 48.000 personas”, indicó Vera.
Agregó que la inversión para los trabajos de reparación fue de US$ 250 mil, financiado por el Fonacide.
El cañonero Humaitá fue construido entre 1930 y 1931 en el astillero Cantieri Navali Odero Terni, de Génova, Italia, y diseñado por el Tte. de marina José Bozzano. El barco habría llevado a 62.546 combatientes hasta Puerto Casado en 84 viajes, además de todo tipo de logística.