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Además, decide si “Juan Pueblo” va al sector privado o sigue esperando un espacio libre en la camilla de algún centro asistencial público. La coordinadora de Terapias, Dra. Lissa Samudio, dijo que los casos graves se pueden resolver solamente en las urgencias.
La directora del Sistema Integrado de Urgencias y Emergencias del Ministerio de Salud, Lissa Samudio, afirma que en el país la mayoría de los ingresos a terapia intensiva (el 98%) se dan por causas totalmente prevenibles.
Indica que el mayor nivel de ocupación es de pacientes con traumas (lesiones de causas externas, colisión de vehículos, violencia entre personas). Le siguen los eventos cardio y cerebrovasculares, que son provocados por enfermedades crónicas como la diabetes, la hipertensión arterial, la obesidad y otros.
Central, Alto Paraná, Amambay e Itapúa son las zonas con mayor requerimiento de terapias, sobre todo por traumas.
Samudio menciona que la mayoría de estas causas son totalmente prevenibles. “Falta instalar conciencia y una cultura preventiva”, asegura la profesional terapista.
Para asistir a este tipo de patologías, Salud Pública incrementó su capacidad de camas de terapia. En el 2008 existían solo 92 camas. Actualmente se cuenta con 250 camas de cuidados intensivos, de las cuales 235 se encuentran operativas. El resto está bajo mantenimiento de equipos y de instalaciones edilicias.
Para la terapia de adultos se instalaron 96 camas de terapia intensiva –que incluyen respirador– y 22 camas de cuidados intermedios para pacientes que no requieren de respirador.
Para pacientes pediátricos –29 días de vida a 18 años de edad– se dispusieron 48 camas de terapia intensiva y 11 de terapia intermedia. En cuanto a terapia neonatológica –de 0 a 28 días de vida– se tienen 42 camas intensivas y 70 intermedias. Sumando estos números, se tienen 289 camas, una cifra superior a la mencionada por Samudio, quien indicó que existen 250 camas de terapia intensiva.
Se cuenta también con una Unidad Especializada de Cardiocirugía Pediátrica, que se encuentra funcionando en el Hospital Pediátrico “Niños de Acosta Ñu”, en Reducto, San Lorenzo. Esta cuenta con seis camas de terapia.
Hoy en día, la mortalidad dentro de las terapias del Ministerio de Salud registra una importante disminución. Se sitúa por debajo del 35%. “Eso es una satisfacción que hemos alcanzado”, indica la profesional.
Recordó que anteriormente se observaban terapias con 60% de mortalidad. Esto significa que seis de cada diez pacientes que ingresaban a la unidad de cuidados intensivos fallecían.
“La terapia intensiva está hecha para que el paciente salga con la salud restablecida”, declaró.
Disposición de camas en el sector privado
El Ministerio de Salud Pública ha dispuesto recientemente una nueva modalidad de contratación de camas de cuidados intensivos dentro del sector privado, bajo la denominación de día-cama. Se recurre a esta modalidad en caso de que no se pueda asistir al paciente en un hospital del sector público.
La contratación del día-cama hace referencia a la ocupación que realiza cada paciente y se contabiliza cada 24 horas.
“Esta modalidad es mucho más práctica desde el punto de vista de facturación y control del servicio”, explicó Samudio. En diciembre de 2012 se realizó la compra por licitación de 1.900 días cama por 1000 millones guaraníes.
En los últimos tiempos, solo derivaron a tres
Desde setiembre del 2012 hasta la fecha, el Ministerio de Salud Pública derivó solamente tres pacientes al sector privado. Esto, a pesar de que cuenta con una licitación vigente y un contrato con el Consorcio de Terapias Privadas del Paraguay y para ello dispone de un rubro de más de mil millones de guaraníes.
En el 2011, en la misma época, es decir, diciembre a enero, la derivación fue de 69 pacientes. Se trata de un período en que se registran muchos pacientes a causa de los accidentes de tránsito, a los que se suma la epidemia del dengue.
En los primeros días de diciembre último, el ministro Antonio Arbo, había informado que recibiría del Fonacide la suma de G. 92.000.000.000, de cuyo monto se prometió pagar la deuda que actualmente se mantiene con las terapias del sector privado y que supera los mil millones de guaraníes. Algunas cuentas inclusive son del 2011. Esta situación de mora ya supera los 8 meses, cuando que el contrato establece que las deudas se deben abonar en 60 días. Incluso ya afecta también al sector de diálisis.
Los enfermos renales salieron a las calles para manifestarse debido a la amenaza de corte del servicio.