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Juana Delgado Torres, quien se desempeñó durante años como docente ad honórem de la UNP y miembro de la Coordinadora por la Transparencia en el uso de los Recursos Públicos en Ñeembucú, fue una de las primeras en cuestionar los manejos de la casa de estudios luego de leer los informes finales de las auditorías realizadas por la Contraloría General de la República. Como consecuencia, Ríos utilizó una radio de la capital del Ñeembucú para acusarla de haber engañado a varias personas en su carácter de funcionaria de la sucursal regional del Banco General.
“Esta señora Juana Delgado era la que engañaba a la gente (...) Que el Estado paraguayo les devuelva a los ahorristas estafados por gente como Juana Delgado su dinero”, habría expresado durante una entrevista en agosto del año pasado.
Es por ello que Delgado decidió entablar a finales de 2014 una demanda contra el político liberal por calumnia e injuria. Para que la causa pueda seguir, se necesita el desafuero de Ríos, una solicitud que lleva meses durmiendo en la Comisión de Asuntos Constitucionales de la Cámara de Diputados.
“Los fueros sirven solo en el ejercicio de su función como parlamentario y él en aquella oportunidad estaba hablando como decano y no formaba parte de su tarea como legislador”, señaló la denunciante.
Persecución a denunciantes
Varias han sido las denuncias de persecución contra los estudiantes que se animaron a denunciar las irregularidades en la UNP. En algunos casos, los jóvenes tuvieron que abandonar la casa de estudios.