Montaron claque que llegó a vender siderales cifras de cartuchos y tóner

Desde sillas de ruedas hasta artículos de limpieza. Desde construcción de aulas en distintas instituciones educativas hasta compras de materiales de construcción, elementos de limpieza, papeles y construcción de empedrados. “Global SA” hizo operaciones realmente globales para ser una empresa de seguridad privada.

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El primer tímido contrato fue en el 2011 para la Municipalidad de Ciudad del Este y por concurso de ofertas vendieron arroz, fideos, leche, azúcar, aceite, poroto negro. En el 2014 Justo Zacarías Irún ya los contrató para construir dos aulas supuestamente en Los Cedrales con fondos de Fonacide por casi 400 millones de guaraníes. Fueron supuestamente 2 aulas con techos de teja en la escuela básica 2002 Colonia Pengo San Miguel Calle 24 y otras 2 en la escuela básica Fabián Cantero Leiva.

Compraron una librería

En el 2015, año electoral, ya fue Sandra McLeod de Zacarías Irún quien los contrató por la friolera de 2.402 millones de guaraníes para útiles de escritorio, oficinas y enseñanza (sic). Proveyeron desde cúter hasta libros de actas que costaron entre 20.000 y hasta 44.500 guaraníes; cintas adhesivas, cola plástica, perforadoras, tóner para impresoras (con precios que fueron desde medio millón hasta 1.830.000 por unidad) además de una variedad de cartuchos de tintas. Gigantescas cantidades de cartuchos fueron adquiridas, con cifras que alcanzaron hasta unos 4.000 cartuchos de tinta para impresora en color negro. Y unas 300 para impresoras color, incluyendo cintas para impresora de pvc e impresoras matriciales en cantidades descomunales.

Pero no le fue suficiente la primera compra sino que arremetieron con una segunda donde compraron formularios continuos, papeles para impresoras, papel contact, carbónico, para fax, cartulinas, papel sulfito, cartulinas de hilo, blocks de papel adhesivo, papel sifón, sobres oficios y sobres manila.

Luego volvió a tocarle el turno a la gobernación de Justo Zacarías. Ya que habían incursionado en la supuesta construcción de dos aulas, fueron por construcción de empedrados y les adjudicaron por valor de casi 214 millones de guaraníes un empedrado que supuestamente va camino al cementerio en la zona de Minga Pora. Tras este contrato, le volvieron a dar otro por más de 715.000.000 de guaraníes para construir supuestamente dos aulas y tres cocinas comedores, todos en Ñacunday. El aula en la escuela básica 5.437 de San Roque González de Santa Cruz; otras 2 aulas y un comedor cocina en la escuela básica 2 de Octubre-8 de Diciembre, un comedor para la escuela básica Virgen de Caacupé, Colonia Torocua y otro más en la escuela básica San Luis Gonzaga.

La contratación más alta realizada por Justo Zacarías fue para construir un local de Senepa en Pdte. Franco que hasta setiembre del año pasado, por lo menos, no se usaba. Les costó casi G. 1.500 millones a los ciudadanos paranaenses. El rubro de compras de útiles de oficina fue el más explotado; hasta materiales de construcción adquirieron.

Números del escándalo

Más de G. 2.400 millones compró Sandra McLeod de Zacarías Irún a la empresa Global solo en útiles. Casi toda la friolera se descargó sobre 4.000 cartuchos para impresora y más de 1.000 tóner, algunos costaban más de G. 1.800.000. Otros G. 605.000.000 compró en materiales de construcción. GLOBAL SA vendió 150 sillas de ruedas, pediátricas y para adultos, a razón de G. 1.000.000 cada una. La compra se hizo también en medio de la campaña electoral del 2017 (mayo). Vendieron escobas, baldes, virulanas, palitas y hasta lustramuebles y limpiavidrios.

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