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El comisario Abel Cañete ya está siendo investigado porque un cliente de la asesinada abogada Laura Casuso, el criminal brasileño Marcelo “Piloto” Pinheiro, lo incriminó en supuestos pagos de sobornos. Desde el pasado 8 de noviembre que Cañete fue sometido a investigación por parte de la Policía Nacional tras ser denunciado por el narcotraficante brasileño de pedir dinero a cambio de protección.
Declaración jurada
Cañete dijo ayer en Radio ABC Cardinal 730 AM que presentó su declaración jurada de bienes, pero aseguró no recordar cuándo lo hizo. Consultado sobre si podía transparentar sus bienes, dijo que su declaración jurada está abierta a quien quiera; consultamos si podíamos ir luego del programa de ABC Cardinal y si nos entregaría una copia, y rápidamente esquivó la respuesta.
A renglón seguido ya dijo que podíamos ir a pedir su declaración jurada a la Contraloría. Como se sabe, la propia Contraloría interpuso acciones judiciales para evitar dar a conocer las declaraciones juradas de funcionarios públicos.
Sobre sus propiedades identificadas por nuestro diario en una publicación del año pasado, dijo: “Mi residencia hace 30 años que está ahí. Uno tiene derecho a tener una vivienda. Son propiedades que hemos adquirido conjuntamente, hemos comprado a cuotas, obteniendo préstamos, muy honradamente”, decía repetidamente cuando se le requería sobre el número de casas que posee. “No tengo muchas, ni tampoco tengo estancias; me manejo humildemente”, fue lo único que llegó a decir.
Fue insistido al menos una decena de veces sobre la cantidad de propiedades que figuran en su patrimonio y todas las veces se negó a dar la cifra.
Las propiedades
Publicaciones del 11 de setiembre del año pasado en nuestro diario ya daban cuenta de varias propiedades a nombre del alto jefe policial. Varias residencias en varias cuadras del barrio donde vive e inclusive un inmueble en la zona de Minga Guazú donde registraba una inversión de G. 700 millones según sus propias declaraciones oficiales.
Aparecían a su nombre propiedades también en Reducto (San Lorenzo), varias con circuitos cerrados de seguridad, amplios jardines, estructuras metálicas importantes para aves y hasta un depósito que sale al otro lado de la calle. Los muros son de al menos unos 10 metros de altura.