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Indicó que la familia ya había cumplido con ellos al pagar el rescate y estaba siendo retenido sin motivo, ya que el objetivo de ellos se había cumplido al obtener el dinero.
Velázquez consideró que influyó en la decisión del grupo el pedido de la Iglesia Católica y la presión de la ciudadanía.
En cuanto al papel de la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC) indicó que está haciendo su labor, pero que en este caso, la liberación de Arlan fue tomada por el EPP en forma exclusiva, cumpliendo de alguna manera con la promesa hecha a la familia.
Indicó que no conocía el papel que pudo haber cumplido la FTC, pero no se veía una relación directa con esta liberación, sino que más bien pareció una decisión unilateral.
Consideró que, con este gesto, pretenderían mostrar que los integrantes de ese grupo tienen sentimientos, más aún por el hecho de que lo realizaron el día de Navidad, fecha en la que se celebra el nacimiento de Jesucristo.
Velázquez señaló que la permanencia como secuestrado del suboficial de Policía Edelio Morínigo resulta un impedimento para la acción de las fuerzas de seguridad. Apuntó que es una situación distinta a la que se tiene con el denominado Agrupación Campesina Armada (ACA), a cuyos integrantes han podido atacar directamente.
Indicó que el hecho de que tengan en sus manos al suboficial da un menor margen de maniobra a las FTC, ya que si ocurre un enfrentamiento y resulta un desenlace trágico para el secuestrado, la responsabilidad recaerá en las fuerzas de seguridad del gobierno.
Por otro lado, desestimó que se pueda negociar la vida del policía por la liberación de las personas del EPP encarceladas, señalando que ni siquiera la ley lo permite y no existe posibilidad.