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“Año Nuevo, desde hoy, sin ayer, solo una mañana. Año Nuevo, mi nuevo año, bienvenido entra en mi casa”. Juan Pardo (1942), cantautor español.
“Y vamos abriendo puertas / Y vamos cerrando heridas / Porque en el año que llega / Vamos a vivir la vida”. Gloria Estefan (1957), cantautora cubana. (Compositor Flavio Enrique Santander).
“Año Nuevo, vida nueva, más alegres los días serán. Año Nuevo, vida nueva con salud y con prosperidad”. Billos Caracas Boy (1940), orquesta musical venezolana.
“Feliz Año Nuevo, Feliz Año Nuevo. Ojalá todos tengamos esperanzas y voluntad para alcanzarlas”. ABBA (1972), grupo musical sueco.
Circuncisión
En el calendario romano general, el 1 de enero se celebraba la festividad de la Circuncisión de Cristo hasta la reforma del Calendario en 1960 por el papa Juan XXIII, que dio a la celebración litúrgica el nombre de “Octava de Navidad”. En la actualidad se celebra como Solemnidad de Santa María, Madre de Dios.
Es el octavo día tras la celebración del nacimiento de Jesús y evoca la antigua tradición hebrea, el nuevo pacto con Abraham. La circuncisión era el signo de incorporación al pueblo de Israel. Se realizaba el octavo día del nacimiento y dispensaba el reposo sabático.
El rito podía ser realizado por un mohel (especialista en la práctica) u otro varón calificado. Podía realizarse en casa o en la sinagoga, ante diez testigos. Si se lleva a cabo en la sinagoga, el padrino mantiene al niño sentado sobre la silla del profeta Elías, llamado “el ángel de la Alianza”. Es un acto eminentemente religioso que comprende dos bendiciones, y es en esta ceremonia en que también se le da nombre al niño.
Esta práctica es signo característico del pueblo judío, que la adquirieron durante el tiempo que fueron esclavos de los egipcios. La circuncisión —alianza de la palabra— es uno de los rituales principales del judaísmo. Tiene tanta importancia que aún se recuerda el día que Abraham fue circuncidado, a los 99 años, junto con su hijo Ismael. Ese día, llamado Yom Kipur o Día del Perdón, es el día más santo y solemne de todo el año.
Esto en el sentido religioso. La circuncisión es una intervención quirúrgica sencilla por medio de la cual se corta el prepucio, con anestesia local y no requiere hospitalización o, también, general. Al parecer, los egipcios fueron los primeros en retirar el prepucio, pero como un ritual previo al ingreso al sacerdocio. Siguió siendo parte del ritual religioso hasta el año 50, en que Pablo de Tarso declaró en su Carta a los Gálatas que la circuncisión no era necesaria para ser cristiano.
En Arabia, aunque la circuncisión precedió al islam, su práctica no es ordenada por el Corán. Asimismo, no es una práctica únicamente circunscrita al mundo occidental: para la mayoría de las tribus africanas, la circuncisión es una ceremonia de iniciación a la masculinidad, es el signo de dejar atrás la niñez para pasar a ser adulto. A partir de la segunda mitad del siglo XIX, la circuncisión tuvo su ingreso en el campo de la salud pública. Los médicos victorianos, deseosos de introducirla en la práctica cotidiana, sugirieron utilizarla como una práctica que promovía la higiene y la salud. Para entonces, la circuncisión se había convertido en una práctica rutinaria en los EE.UU. y se le consideraba la solución para una extensa gama de problemas médicos y sociales.
Fuentes: www.aciprensa.com/ / https://es.aleteia.org/ / www.elfinanciero.com.mx/ / www.wikipedia.com
Recopilación: mpalacios@abc.com.py