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Las luminarias de la industria del cine se dieron cita en la gala de los Premios Óscar en el Teatro Dolby de Hollywood, con sus mejores atuendos con la esperanza de llevarse algún galardón. Como cada año, la fiesta del cine dejó sucesos para la posteridad, aunque si algo caracterizó a esta 85.ª edición, fueron los números musicales.
Fue una noche atípica en cuanto al reparto de premios, pero en la que se vivió de todo: desde el emotivo pero humilde discurso de Ben Affleck, las manos vacías de Steven Spielberg; el oso Ted, que no quiso perderse la fiesta; Barbra Streisand, quien subió al escenario de un Óscar luego de 36 años, y las anécdotas infaltables, como la caída de Jennifer Lawrence al subir las escaleras o el vestido traslúcido de Anne Hathaway, y la sorpresiva aparición de Michelle Obama para anunciar un premio ya forman parte de los momentos más inolvidables de una noche mágica. Aquí, algunos de ellos.
William Shatner, con el uniforme de gala del Enterprise. La primera sorpresa temática de la noche: William Shatner irrumpió ataviado como el mítico capitán Kirk, con el uniforme de gala del Enterprise, regañando al maestro de ceremonia, Seth MacFarlane, diciéndole que se “comportara” y no fuera tan duro con sus críticas a los medios.
Chiste de mal gusto. Seth MacFarlane se pasó de la raya con un chiste sobre el asesinato de Lincoln, que no cayó muy bien a los presentes. “Yo diría que quien se metió de verdad en la cabeza de Lincoln fue John Wilkes Booth”, afirmó en alusión al asesino del presidente. “¿Qué pasa? ¿150 años después y todavía es demasiado pronto?”, preguntó Seth y como respuesta recibió abucheos del público.
Un tropezón sí son dos caídas. Jennifer Lawrence ha pasado a la historia de los Premios Óscar por esa caída en las escaleras del Dolby Theatre cuando fue a recibir su estatuilla, que hizo que la fuera a socorrer su coprotagonista Bradley Cooper. Ya sufrió otro percance similar cuando fue a recibir el premio del Sindicato de Actores y se le enganchó el traje; y subió con el vestido roto. Afortunadamente, se lo tomó con humor: “Agradezco esos aplausos por la caída”, refirió.
El empate. Este año se dio un empate en la categoría de mejor montaje de sonido. La noche más oscura, de Kathryn Bigelow, y Skyfall, de Sam Mendes, compartieron la estatuilla, algo que solo tiene cinco precedentes en las 85 ediciones de los Óscar.
La delantera de Anne Hathaway. Protagonistas de la noche, el vestido de Prada dejaba al descubierto gran parte de su espalda y marcaba sus pezones, hecho que no dejó muy bien parada a la actriz. Sin inmutarse, Hathaway dijo al respecto: “Mi madre dice que este vestido es de negocios por delante y de fiesta por detrás”.
Adele y su magia. Adele rompió con la maldición de las canciones de Bond. Aunque era apuesta segura, no por ello deja de ser un hito. La cantante ha logrado que “Skyfall” fuera la primera canción de Bond ganadora de una estatuilla tras la nominación de tres temas anteriores, como Vive y deja morir, en 1974; La espía que me amó, en 1978, y Solo para sus ojos, en 1982. Los dos premios conseguidos por Skyfall se suman al de efectos de sonido de Goldfinger, en 1965, y el de efectos visuales de Operación Trueno, en 1966.
La tercera para Daniel. El actor británico Daniel Day-Lewis ingresó entre los privilegiados de los Óscar al acreditarse su tercer premio como mejor actor protagonista; el único en esa situación. Jack Nicholson tiene dos como protagonista, pero uno de reparto, mientras que Walter Brennan ganó los tres en la categoría de actor secundario. También es el primer actor que gana por una película de Spielberg y por dar vida a un presidente de Estados Unidos.
A saltitos. Kristen Stewart llevó un glamoroso vestido con cola… pese a tener que caminar con muletas. Cuando le tocó salir al escenario a entregar un premio, se animó y avanzó cojeando, a saltitos.
El regreso. Barbra Streisand enmudeció el Dolby Theatre interpretando el tema central de la película Nace una estrella, en lo que significó su primera actuación en los Óscar desde 1977, cuando cantó el mismo tema de la película homónima ganadora de ese año, en el momento del tradicional homenaje a los actores fallecidos a lo largo del último año.
¡Todo un récord! El 24 de febrero, Emmanuelle Riva se paseó por la alfombra roja de los Óscar, el día de su 86 cumpleaños. Nacida en Cheniménil, Francia, la nominada por su interpretación en el filme Amor es la más longeva actriz de la historia en competir por una estatuilla. La actriz, poeta y fotógrafa comentó sobre su papel en Amor, uno de los más bellos de su carrera: “Es maravilloso haber recibido un regalo como este a mi edad”.
Presentadora de lujo: Michelle Obama. Desde la Casa Blanca, la primera dama norteamericana apareció en la pantalla gigante, y fue la encargada de presentar y abrir el sobre para anunciar el Óscar a la mejor película, que finalmente fue para Argo, de Ben Affleck. “Felicito a todos los nominados por trabajos que nos hicieron reír, llorar y, de hecho, nos enseñaron que el amor puede luchar contra todo y puede transformar nuestras vidas de la manera más sorprendente”, refirió Michelle Obama luego de haber sido presentada por Jack Nicholson.
Argo, la gran ganadora de la noche. La cinta de Ben Affleck es la cuarta película en ganar el Óscar sin tener a su director nominado. También es la primera que logra la estatuilla siendo la quinta más nominada. En cambio, sigue el camino de American beauty, El retorno del rey y Slumdog millionaire, que ganaron el Óscar siendo las únicas películas que triunfaron previamente en Critics’Choice, Globos de Oro, Gremio de Productores, Gremio de Actores, Gremio de Directores y Bafta. Lo anecdótico de que Affleck no haya sido nominado a mejor director produce una disociación entre película y director que no ocurría desde 2006 con Crash y Brokeback Mountain. Además, Ben Affleck (que sobre todo es conocido por ser actor) tiene dos Óscar, pero por otras facetas como son la de la producción y el guión. “¡Wow!”, dijo Affleck, productor, director y protagonista del filme, al subir al escenario junto a los coproductores George Clooney y Grant Heslov. “Quiero reconocer a Steven Spielberg, que es un genio”, manifestó, y recordó que hace 15 años era “solo un niño” cuando ganó su primer Óscar por el guión de Good Will Hunting, 1997, y agregó que no importa que la vida te golpee, eso es algo que siempre va a suceder. “Todo lo que importa es levantarse”, añadió. Junto al Óscar a mejor edición, Argo ganó dos de los siete premios a los que aspiraba.
¡LOS ÓSCAR 2013 ARRASAN DE NUEVO!
La ceremonia no solo registró mayor audiencia televisiva que en 2012, sino de los últimos tres años, con la ayuda del nuevo presentador Seth MacFarlane, cuya presencia impulsó el interés de la franja de población comprendida entre los 18 y los 49 año. No obstante, aún está lejos del récord de 2004, cuando los Óscar fueron seguidos por 43,6 millones de televidentes.
ESTRENOS
Mediagroup Entertainment presentó el 1 de marzo Django desencadenado y el 15 estrena Amor.
Por su parte, Filmagic Entertainment anuncia para el 22 Los Miserables y Anna Karenina, el 15.
Distrimovies S.R.L. pondrá en pantalla el 8 La noche más oscura.
Fuente: www.mujerhoy.com/ www.que.es/ www.loqueyotediga.net
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