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Los panaderos aficionados están en la permanente búsqueda de las mejores recetas, pero a veces es necesario algo más que ganas de amasar y evitar errores frecuentes que hacen que el producto final no sea el deseado.
Un pan esponjoso y suave es el resultado de dominar ingredientes, técnicas de amasado, fermentación y horneado. Es fundamental saber que elaborar pan en casa es un arte que combina ciencia, pasión y paciencia. Aquí están los secretos para lograr texturas irresistibles.
Ingredientes clave
Harina de calidad. Sin esto no es posible avanzar.
La recomendación es optar por harina de fuerza (alto contenido en proteína, 12-14%) para panes como baguettes o ciabatta.
Para panes integrales se podría mezclar con harina blanca para mejorar la esponjosidad.
Un detalle del que poco se habla o comenta en las recetas que pululan en las redes sociales es la hidratación adecuada.
Una proporción de 60-70% de agua (ej: 300-350 ml por 500 g de harina) según los expertos, activa el gluten.
Panes como la ciabattarequieren hasta 80% de hidratación.
Habrá que tomar nota de las grasas y azúcares a incorporar a la masa.
La manteca, aceite y huevos aportan suavidad. El azúcar alimenta la levadura y mejora el dorado.

¿Cómo evitar durezas?
Un detalle clave en el proceso para evitar que el pan sea duro es la técnica de amasado, si no se cuenta con una mezcladora.
Primer paso, desarrollo del gluten. Amasar durante 10-15 minutos (máquina) o 15-20 (mano). Estirar la masa: si se forma una “telita” transparente (prueba del vidrio), el gluten está listo.
Existe un método de plegado para masas húmedas (como para pan de masa madre), doblar la masa sobre sí misma cada 30 minutos durante la fermentación.
Temperaturas
Usar agua tibia (25-30°C) para activar la levadura. Evitar el exceso de calor, que mata los microorganismos.
Pero atención que existen técnicas de fermentación y horneado según la variedad del pan a ser elaborado:
*Primera fermentación (bulk es la más común): Dejar reposar la masa hasta doblar su volumen (1-2 horas a 25 °C). Panes de masa madre requieren 4-12 horas.
*Formado: Modelar con suavidad para no desgarrar el gluten.

Para el momento del horneado prestar atención:
*Baguette: horneado a 220-230 °C con vapor (coloca un recipiente con agua en el horno) para corteza crujiente.
*Pan integral: hornear a 200 °C para evitar sequedad.
*Brioche: 180 °C, por su contenido en manteca.
*Focaccia: precalentar una bandeja inferior para vapor al colocar la masa.
¿En el supermercado?
Si preferís comprar panes en el supermercado anotá estos secretos para elegir el mejor. Primero, la corteza debe ser crujiente (no gomosa) y uniforme. Un pan bien hidratado es más pesado. Fijate en la fecha de horneado. Cuanto más reciente, mejor.
Lo ideal: menos de 24 horas.

Los No del pan
¿Qué no hacer al momento de elaborar un pan? Anotá estos tips y evitá errores:
-Usar levadura vencida o agua hirviendo: matarás los microorganismos.
-Amasar insuficientemente: resultará en miga densa.
-Fermentar en exceso: la masa colapsará y tendrá sabor ácido.
-Sobrehornear: seca el pan. Usá un termómetro (90-95°C interno).
-Cortar caliente: deja enfriar una hora para evitar que se desinfle.