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Además, algunos de ellos son absolutamente fantasiosos, como por ejemplo la idea de una central hidroeléctrica en el río Paraguay, cerca de Rosario, otra sobre el mismo río, al norte de este sitio, y otra más basada en la derivación de aguas del río Paraná, aguas arriba de Itaipú, para alimentar el río Acaray y turbinarlo allí. Realmente ideas extravagantes que permiten dudar de la seriedad del Plan Maestro.
Asimismo, este plan se basa en un crecimiento de la demanda de energía eléctrica en el próximo decenio de un 9% anual, sin duda exagerado. Además pasaran factura a las inversiones extranjeras los fracasos de inversionistas en emprendimientos gravitantes, como la explotación de oro o la electrointensiva de carburo en la serranía de los Altos, acosadas por la indolencia o inoperancia de las instituciones. O el reciente fracaso para otra electro intensiva elaboradora de aluminio. Beneficiosas o no, los perjuicios ocasionados, o la falta de soluciones, representan una mala imagen paraguaya en el exterior.
Hay que hacer notar que el “Sistema Inteconectado Nacional (SIN)”, a pesar de su ampulosa denominación, realmente está “desconectado”.
La ANDE tiene dos redes eléctricas independientes y hasta la fecha imposibles de interconectar. Una alimentada por Itaipú y Acaray y la otra por Yacyretá.
El Plan Maestro previó la interconexión de ambas redes y a la fecha esta ya construida una línea de transmisión trifásica, de corriente alterna, de 500.000 voltios de tensión y 350 kilómetros de longitud, desde Ayolas a Villa Hayes. Sin embargo tiene un defecto: en Ayolas no se conecta a nada y en Villa Hayes tampoco. Tal como está no tiene finalidad alguna.
La supuesta información de que solo faltaba conectar a las barras de Yacyretá no tiene sustento, pues el problema es de una inusitada falta de previsión para solucionar un problema técnico mayor, fundamental y poco usual en el mundo de la electricidad. Este problema se genera por la interacción del sistema de generación en Itaipú del diferente sistema argentino. En efecto la generación en Itaipú se basa en gigantescos grupos turbogeneradores hidráulicos de una masa (peso) descomunal y el sistema argentino (en todo ese país) en el empleo de turbo generadores hidráulicos de masa menor, y de turbogeneradores térmicos de masa aún más pequeña. Si se interconectan ambos sistemas, acoplándolos a través de un sistema tradicional, inevitablemente se producirá una inestabilidad que dañará las instalaciones electrotécnicas. Es un fenómeno eléctrico que se denomina estatismo, oculto al público durante décadas y constituye uno de los secretos mejor guardados en la historia universal. Simplemente Itaipú no puede acoplarse con Yacyretá. Más simple aún, se garantiza que el Paraguay no pueda utilizar en forma masiva la energía generada en esta central que queda a disposición exclusiva de la Argentina.
Sin embargo hay soluciones. Soluciones costosas pero posibles. Más aún es la solución empleada en el complejo conversor de Garabí, sobre el río Uruguay, a escasa distancia de Yacyretá, a través de la cual argentina exporta su parte de electricidad y también otra igual derivada de la parte perteneciente a la ANDE. Esta parte paraguaya debería ser motivo de una investigación por lo menos para dar lugar al resarcimiento al daño patrimonial devolviendo a la ANDE el monto de su parte alícuota.
La inteconexión de ambos sistemas de redes de la ANDE debe tener una solución similar a la de Garabí. Lamentablemente la línea de alta tensión Ayolas – Villa Hayes ya fue construida sin prever la estación convertidora y debiera ser transmitida en la misma tensión pero en Corriente Continua. En vez de 3 conductores de 350 Km cada uno. solo se requerirían 2, con la economía del caso, y con menores pérdidas eléctricas. Esta Obra es prioritaria, indispensable, urgente y fundamental.