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La Sanlorenzana SA de Transporte y Turismo (Línea 56) es una empresa de transporte público de pasajeros que conecta Reducto (San Lorenzo) con Sajonia (Asunción). Es reconocida por los pasajeros que realizan el trayecto por su servicio diferencial con buses con aire acondicionado, pero en su comunidad resalta por la asistencia a niños con problemas de aprendizaje.
La firma cuenta con una sala equipada para el servicio, a la cual acuden más de 60 alumnos regulares de la educación primaria, hasta los 13 años, en tres horarios, de 8:00 a 10:00, de 10:00 a 12:00 y 13:00 a 15:00. Los lunes, miércoles y viernes trabaja un grupo, mientras que los martes y jueves lo hace otro grupo de chicos.
Carolina Peña de Peralta, directora de la firma, comenta que incluso hay niños en lista de espera porque la demanda del refuerzo escolar es grande. “Los colegios y escuelas de la zona nos envían los alumnos con problemas y la satisfacción más grande para nosotros es que los niños aprenden a leer y escribir, y logran pasar de grado”, afirma.
Además, los beneficiarios acceden a apoyo psicológico, merienda escolar, útiles escolares, medicamentos (según necesidad), y sus familias deben formar parte de charlas mensuales en las que reciben consejos y guías para la educación integral de sus hijos.
Nilsa Romero, docente y psicopedagoga de la firma, cuenta que atiende un promedio de 150 niños por año, algunos de ellos participan durante los 365 días, mientras que a otros les da “de alta” cuando se manifiesta que avanzaron lo suficiente, a fin de brindar el espacio a otros niños con necesidades. “A esta altura del año, las mamás ya se acercan a agradecer porque sus hijos pasaron de grado, y esa es la mayor satisfacción para esta inversión”, destaca.
El servicio a la comunidad se da mediante un programa de la Escuela de Formación de Asistentes para Empresas de Servicio (EFAES) del Opus Dei, en el que están involucradas directamente tres personas: una psicopedagoga, una psicóloga y una asistente social. La empresa de transporte, por su parte, solventa los gastos materiales y salariales de la asistencia.
La Sanlorenzana SA invierte aproximadamente G. 150 millones anuales en este programa de Responsabilidad Social Empresarial, que no cesa ni durante las vacaciones, ya que se imparten las clases todos los meses, pero con tolerancia de asistencia en la época de receso escolar.
Ada Morales, madre de dos chicos de 3.° y 7.° grados que participan del apoyo escolar, resalta que este es un aporte fundamental para las familias. “No es una ayuda solo para los niños, sino para nosotros, los padres, porque además tenemos las charlas para saber cómo disciplinarles, también jugamos, nos integramos. Para mí, en particular, es un avance grande porque mi hijo es repitente”, sostiene.
150 niños pasan por el aula de apoyo de aprendizaje escolar de La Sanlorenzana SA.
3 horarios diarios tiene el refuerzo escolar para atender la gran demanda existente.
10 años hace que la empresa dio inicio a esta iniciativa en su comunidad.