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Vamos a incluir y fijar estos hábitos de higiene en nuestro día a día y llevaremos una vida sana y feliz.
Al comenzar el día es importante cepillarse los dientes correctamente y lavarse la cara.
Es necesario darse una ducha, y las repetiremos las veces que sean necesarias.
Por ejemplo: después de hacer ejercicios o si nos ensuciamos.
Hacer deportes es parte de una vida saludable, ya que tenemos que mover el cuerpo para mantenernos flexibles y fuertes. Además, debemos alimentarnos correctamente, con un sabroso desayuno, media mañana, almuerzo, merienda y cena.
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Preferimos los alimentos menos procesados, si fueron hechos en casa, mejor. Consumimos frutas y verduras de estación, así como lácteos y otras proteínas y, por supuesto, cereales para tener mucha energía durante el día.
No olvidemos incluir tiempo de recreación. Es beneficioso hacer aquello que nos gusta como jugar, hacer ejercicios, pintar u otras actividades artísticas.
Una rutina saludable no está completa sin un buen descanso.
Lo ideal es mantener un horario fijo para acostarnos y otro para levantarnos, así nos aseguramos un descanso adecuado, de unas ocho horas.
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Por último, no olvidemos una revisión anual con el dentista para verificar la salud de nuestros dientes.