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La historia nos enseña que los seres humanos han utilizado drogas con diferentes finalidades. Ceremonias religiosas, usos medicinales e instrumentos de recreación. Estas prácticas se repiten en todas las épocas y culturas.
Otra característica común es que también en todas las culturas existió alguna forma de regulación de los usos. Platón hablaba de la importancia de crear leyes que regulen el consumo a partir de cierta edad. En «Las leyes» se expresaban sus teorías acerca de la política y organización social.
«Empezaremos haciendo una ley que prohíba a los jóvenes probar el vino hasta los 18 años…. y hasta los 30 nuestra ley prescribirá que el hombre pruebe el vino con mesura, aunque absteniéndose radicalmente de embriagarse bebiendo en exceso. Luego, una vez alcanzada la cuarentena, nuestra ley permitirá en los banquetes invocar a todos los dioses y, va de suyo, una especial invocación dirigida a Dioniso en vista de ese vino que, a la vez, sacramento y diversión para los hombres de edad, les ha sido otorgado por el dios como un remedio para el rigor de la vejez».
En la actualidad podemos clasificar las drogas de muchas formas, como habíamos visto anteriormente al inicio del año lectivo. Podemos agruparlas según sus funciones en medicinales y recreativas; la legislación permite distinguir entre legales e ilegales. Recordemos, también, las demás formas de clasificar: depresoras, estimulantes, alucinógenas, otras, según su efecto.
Con relación a las drogas recreativas, también son agrupadas según si son lícitas o no. Por ejemplo: el alcohol y tabaco dentro de las drogas legales y la marihuana, cocaína y éxtasis dentro de las ilegales. Un grupo de drogas medicinales también es utilizado con fines recreativos, por lo que su venta es regulada y el consumidor puede acceder a él solo con receta médica. Este es el caso de los tranquilizantes.
Las regulaciones se orientan a controlar el uso de las drogas legales, pues las ilegales están prohibidas y, por lo tanto, se piensa que no serán consumidas. Por ejemplo: en nuestro país, el marco jurídico aprueba el consumo de alcohol a partir de los 21 años.
En épocas de fiestas, las familias organizan todo tipo de reuniones y celebraciones en las cuales el alcohol es un invitado obligado. Si bien este texto está dirigido a los jóvenes en edad escolar que tienen prohibido por ley beber alcohol, las indicaciones sobre los riesgos que conllevan beber en exceso son importantes para aprender a analizar ciertas situaciones que se dan en los contextos de las celebraciones, incluidos los menores de edad en ocasiones.
Actividad
Contesta.
a. ¿Cómo podemos agrupar las drogas según sus funciones?
b. ¿Qué expresaba Platón en «Las leyes»?
c. ¿Qué riesgo ocasiona beber en exceso?
Fuentes
Programa Integral de Desarrollo Educativo. Prevención en las Instituciones Educativas. Asunción, Paraguay: Prever.