Cargando...
“Aprovecho la oportunidad para pedirle a Hacienda que libere los fondos, se tiene que invertir más en equipos, en la espuma necesaria para combatir esto”, expresó Valdez en aquella ocasión.
En medio de mucho nerviosismo por la situación que en ese momento era incontrolable, sostuvo que si tuvieran los recursos necesarios podrían controlar las llamas, pero la carencia de equipos complicaba el panorama.
Mencionó que los bomberos voluntarios disponían de un carro con espuma química que fue trasladado desde el aeropuerto intencional “Silvio Pettirossi”, en Luque, hasta la subestación de la ANDE en San Lorenzo, lo que ayudó a sofocar el incendio en unas tres horas.
Valdez informó que, tras la última experiencia, los representantes del Cuerpo de Bomberos Voluntarios del Paraguay (CBVP) mantuvieron una reunión con el ministro de Hacienda, Santiago Peña, quien prometió la liberación de los fondos presupuestados. Añadió que la promesa dejó satisfechos a los combatientes de siniestros, aunque aclaró que falta mucho para ello.
“Estamos satisfechos con la reunión con el ministro de Hacienda, quien prometió que iba a regularizar los aportes en breve. Pero todavía no tenemos regularizados los aportes al día. Por tanto, esperamos que esa promesa se cumpla para estar totalmente satisfechos”, expresó Valdez.
Sin vínculos con pesquisa
El capitán del CBVP aclaró por otra parte que los peritos de los bomberos voluntarios no participan de las pesquisas iniciadas para esclarecer el origen del siniestro en la estación subestática de la ANDE en San Lorenzo y, por tanto, no cuentan con la potestad para determinar si el incendio fue accidental u ocasionado por la acción humana.
“Nosotros no tomamos parte de las tareas de la investigación, por tanto no tenemos elementos para sostener que fue provocado o fue accidental”, aclaró Valdez.
La investigación está a cargo de la agente del Ministerio Público Viviana Riveros y peritos de Criminalística de la Policía Nacional. También fiscalizan las pesquisas los expertos de la Secretaría del Ambiente (Seam), quienes determinarán si los transformadores contaban con restos del componente químico “Askarel”, considerado altamente tóxico.
Según agentes de Criminalística de la Policía, el lugar donde se originó el fuego “está alejado y se encuentra hacia un alambrado, por ello levantaron muestras del suelo que podrían ayudar a determinar si había o no acelerantes de la combustión para determinar si fue provocado”.