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Las autoridades le dieron finalmente una “reprimenda” al piloto británico porque pasó la línea que separa al pit lane de la pista, lo que podía significarle una penalidad de cinco segundos y darle el triunfo a su compañero de Mercedes, el finlandés Valteri Bottas.
“Fue todo muy confuso”, admitió Hamilton, llamado a declarar ante las autoridades. “Siempre creí que podía ganar, sabía que sería difícil, pero siempre hay que creer”, dijo Hamilton, quien partió desde la 14ª posición y aprovechó un accidente que provocó el abandono del alemán Sebastian Vettel (Ferrari), ahora segundo en el Mundial.
Hamilton, que subió al séptimo lugar ya en las diez primeras vueltas, se desquitó así del triunfo de Vettel en Silverstone y le ganó también el de ayer delante de su propia gente.
Vettel se estrelló contra la barrera de contención en la vuelta 53, a catorce del final, y ahora quedó a 17 puntos de Hamilton, ganador notable, pues había largado en la séptima fila, por un error suyo en la clasificación del sábado.
“Estoy más decepcionado que enojado”, dijo Vettel, que terminó sin puntos “una carrera que tenía segura”, porque frenó tarde en la pista mojada por la lluvia, bloqueó gomas posteriores y no pudo reingresar a la pista, “un error pequeño, pero cuyo impacto en el resultado es enorme”, admitió.
Ferrari se resignó al tercer puesto del finlandés Kimi Raikkonen, que había dejado pasar a Vettel por órdenes de escudería, y ya segundo fue superado en la vuelta 51 por Bottas siete giros después de que se largó a llover.
Raikkonen aprovechó el régimen de safety car tras el accidente de Vettel para cambiar neumáticos y así Hamilton se quedó increíblemente en punta, que mantuvo tras resistir un ataque de Bottas. ANSA