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Estudió Diseño de Espectáculos con énfasis en Vestuario en la Universidad de Palermo, Buenos Aires, Argentina. Además, cursó varias especializaciones en Asesoramiento de Imagen y Fashion Styling, en el Fashion Image Institute, de California; en la Tisch School Of The Arts, de la Universidad de Nueva York, y en el Central Saint Martins, en los Estados Unidos.
Sus inicios como vestuarista se remontan al 2005, cuando el destino la encauzó a integrar el equipo del filme estadounidense Miami Vice (2006). Desde entonces, Tania ha trabajado con reconocidos directores, actores, celebridades, productoras y marcas de todo el mundo, como Michael Mann, Francis Ford Coppola, Colin Farrell, Paul McCartney, entre otros, y ha asistido a personalidades del diseño de vestuario como Michael Kaplan –reconocido por filmes como Blade Runner (1982), Fight Club (1999), Pearl Harbor (2001) –, y James Tyson –famoso por La Momia (1999), Star Trek (2009) y Los Juegos del Hambre (2012)–. La trayectoria de Tania ahora cuenta con un aderezo especial: una nominación a mejor vestuario en The Madrid International Film Festival, por el largometraje nacional Luna de Cigarras (2014).
Es una nominación notable. ¿Cuáles son tus expectativas? Es un honor ser seleccionada entre todas las películas enviadas al festival. Y observando un poco el vestuario de los otros filmes elegidos como finalistas puedo aseverar que son muy buenos. Somos nueve las que llegamos al estadio final en la categoría de mejor vestuario. El Festival Internacional de Madrid será el sábado 11 de julio próximo, y Luna de Cigarras compite, además, en la categoría de mejor maquillaje y peinado para Eddie Romero, mejor actuación de reparto para Sandra Flecha, mejor actor principal para Javier Enciso, y mejor nuevo director talentoso para Jorge Díaz de Bedoya. Ellos representarán al Paraguay durante la ceremonia. Lastimosamente, no podré estar presente debido a compromisos asumidos con anterioridad.
¿De cuándo data tu inclinación hacia el séptimo arte? Soy una amante del cine, en especial de todo lo relacionado con el vestuario. De niña era un poco hiperactiva; por ello, me ponían música y me decían: “Imaginate un cuento”, y, de acuerdo con las canciones, yo iba imaginando los personajes y su vestimenta. Mi interés hacia el cine nació como un pasatiempo. Mi abuela Irene, a quien todos conocieron como Chorita Rodis, era cantante y actriz de circo; ella estimuló bastante mi imaginación. Me hacía practicar todo tipo de bordados, mientras que mi abuelo, Rody Segovia, quien fue autor de varias composiciones músicas, también constituyó una inspiración para mí. En aquel entonces, mi mamá estaba en los Estados Unidos y yo vivía con mi abuela, en San Juan Bautista, Misiones.
¿En qué momento te percataste de que ser vestuarista era tu meta? Estudié Contabilidad durante tres años, pero a la par, también, tomaba cursos de dibujo y costura, y estaba muy pendiente de todo en internet. De esa manera, me topé con la noticia de que filmarían escenas de Miami Vice en el Paraguay. Con el sueño de poder ejercer la función que fuese en la película y de poder conocer a Colin Farrell, preparé mi currículo, que lo único que decía era que había finalizado el Bachiller Contable, hablaba inglés y sabía coser y dibujar. Averiguando pude acceder hasta donde estaba el equipo de filmación en Ciudad del Este, y le mentí al guardia con datos tan precisos que no dudó de mí (risas). Dos días más tarde, me contactaron para una entrevista y, como vieron en mi currículo que sabía coser, me asignaron al staff de vestuario. Hice lo mejor que pude siempre; tanto que me condujeron a Uruguay, donde, finalmente, conocí y pude compartir con Colin Farrell, quien es una persona superhumilde y amistosa. Al volver al Paraguay decidí abandonar Contabilidad e ir a formarme afuera.
¿Qué implica ser vestuarista? Ser cabeza de equipo implica manejar un grupo humano de gente, pero también la parte artística, es decir; diseñar un personaje y dar vida a la visión del director, a la historia, al guión. A partir del vestuario, los intérpretes son capaces de construir realmente un personaje convincente. Trabajar en una película es mucha presión, porque tenés tiempos muy cortos y hay que lidiar con un sinfín de personas. Es siempre mucha adrenalina.
¿Cómo resumís tu labor de esta década? Como cabeza de departamento y diseñadora de vestuario tengo en mi haber seis películas, que son Anselmo (2013), Al margen (2013), Luna de Cigarras (2014), Chiperita (2015), Mangoré (2015) y Guaraní (2015). Además de eso trabajé en varios cortometrajes de trascendencia, como Mita’y (2012), De cómo Marcelo (2012), Y al tercer día (2013) y otros. Durante este periodo también me tocó trabajar en producciones argentinas y en un centenar de anuncios publicitarios. Desde que me inicié, hace 10 años hasta el día de hoy, nunca paré. Cuando uno da lo mejor de sí, la gente te recuerda y valora tu desempeño.
¿Cómo complementás tus ocupaciones profesionales con tu vida en familia? Tengo la suerte de que mi marido, Osvaldo Ortiz, también se dedica a lo mismo, por lo que es muy comprensivo. Y mis hijos, Gabrielle (3) y Gael (1), son dos miembros más del equipo de vestuario. Se comportan superbién, están muy acostumbrados a colaborar con nosotros. A Gabrielle le encanta todo lo que sea ropa y siempre opina acerca del vestuario. Aunque el quehacer es abundante, se trata siempre de lapsos cortos, factor que nos ayuda bastante a conllevar los roles.
¿Algún proyecto en puerta? Por un lado, mi socia Shirley Banks y yo habilitamos el espacio llamado De Película Almacén de Vestuario, en el que también damos en alquiler el vestuario. Además, constantemente dictamos talleres e impartimos cursos y capacitaciones. Al mismo tiempo, estamos abocadas a armar un proyecto denominado Profesionales de Vestuario del Paraguay, con el propósito de aglutinar a todos los que convergemos en este rubro. Nuestro objetivo es cualificar a quienes ya se conducen en vestuario, pero, a la vez, formar nuevos vestuaristas.
Vistiendo desde niña sus personajes imaginarios, Tania no solo se afianzó y descolló con los años, sino que también se hizo merecedora del respeto y la confianza de consagradas figuras del séptimo arte.
The Madrid International Film Festival
Enfocado exclusivamente en películas independientes, este certamen es llevado a cabo desde el 2011, apuntando a potenciar nuevos talentos, poner en relieve la labor de los realizadores independientes que operan en la industria artística del cine, así como de producciones de lengua inglesa y extranjera. Ofrece, además, la promoción y distribución de los filmes.
En su 3.a edición, cuya gala de premiación está prevista para el 11 de julio, están nominados nueve filmes en la categoría de mejor vestuario. Nola Yergen por Valiant, Megan Kavanaugh por The Age of Reason, Sarah Sharp por Baby Crazy, Patrycja Fitzet por Short Supply, Arin Burke por Sophie, Siane Rosaka por Pollen, Adriana de Nicola por Dog Men y Tania Simbron por Luna de Cigarras; realizaciones estrenadas todas entre 2013 y 2014.
Tania Simbron
Diseñadora de vestuario, asesora de imagen, fashion stylist, personal shopper y empresaria. Nominada por el filme Luna de Cigarras a mejor vestuario en The Madrid International Film Festival, celebra 10 años de carrera como vestuarista.
nadia.cano@abc.com.py