No siempre en la vida se puede andar feliz, pero hay que intentarlo. Constantemente te vas a encontrar con situaciones adversas, y tirar la toalla y rendirte te parecerá la única opción. Con una actitud positiva, la mayoría de tus problemas desaparecerán.
¿Es lunes y el fin de semana ya terminó? Al menos arranca una nueva semana para ponerse las pilas y hacer lo que más te gusta. Casi todo tiene solución con perseverancia y paciencia.
Ser optimista tiene una tonelada de beneficios, ya que alivia el estrés al aumentar tus defensas, te da felicidad y mucha confianza cuando superás una dificultad. Además, te ayuda a mantener un ambiente armonioso y una vida con pocas preocupaciones.
Nada es tan malo como parece, pues hasta el peor de los problemas va a parecer una pavada con un poco de actitud. Si no tuviste tiempo para estudiar para el examen, en el próximo hacete un pequeño espacio para leer bien y llegar 10 puntos. Si es que era un final y te fuiste a febrero, eso está un poco más difícil.
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No hay mal que por bien no venga. Se te cierra una puerta, entonces, se abre una ventana. No busques culpables para tus problemas; al contrario, tratá de encontrar soluciones. Siempre podés aspirar a algo mejor. Estas son algunas de las frases que nos ayudan a cambiar la perspectiva que tenemos de la vida. Aunque parezcan muy vacías u obvias, realmente, son de utilidad.
No por tener una mala experiencia hay que bajonearse y empezar a sentirse mal. Con esfuerzo y dedicación, se pueden alcanzar todas las metas que te propongas. No seas el popular argel o pichado, alegrate por los demás y vas a ver que ellos van a empezar a hacer lo mismo por vos.
Por Mauro Arriola (20 años)