El presidente de ADEC, Jorge Figueredo, abrió el evento destacando la necesidad de líderes comprometidos y empresas que prioricen el rostro humano y el entorno. “A través de nuestro ejemplo diario construyamos una sociedad más justa y próspera”, afirmó.
El congreso dejó en claro que la sostenibilidad ya no es una opción, sino una obligación para las empresas que quieran perdurar. Desde la ética corporativa hasta la economía circular, los participantes coincidieron en que el futuro pertenece a quienes integren el impacto social y ambiental en su ADN empresarial.