Zootopia, que se estrenará el próximo 4 de marzo en Estados Unidos, olvida el clásico cuento de hadas y humaniza más que nunca al reino animal situándolo en una civilizada y utópica metrópolis, donde depredadores y presas coexisten pese a las desigualdades, en una trepidante comedia de acción para todos los públicos.
“Nos apartamos del clásico ADN de las películas Disney y de los cuentos de hadas ideales para contar historias relevantes que lleguen a todo el mundo, como hacen las mejores cintas”, dijo hoy el guionista y director Jared Bush en un encuentro con periodistas.
La película de animación presentada hoy en uno de los parques temáticos de Disney cerca de Orlando, centro de Florida (EE.UU.), ocurre en la ciudad ficticia de Zootopia, y cuenta la relación entre un conejo policía con su enemigo natural, el avispado zorro.
El espectador acompañará a la intrépida conejo Judy Hopps (Ginnifer Godwin) y a su circunstancial compañero, el zorro Nick Wilde (Jason Bateman), para descifrar un caso de desapariciones que tiene desconcertada a toda la policía de Zootopia, conformada por rinocerontes, elefantes, guepardos o búfalos.
Y es que en Zootopia existen comisarías, centros comerciales, hospitales, estaciones de metro, corporaciones de prensa y, por supuesto, un ayuntamiento, donde un león trajeado es el alcalde, ayudado por su secretaria, una simpática oveja con gafas.
Pero estos personajes no se libran tampoco de las desigualdades sociales presentes en nuestra sociedad.
El filme también expone casos de “bullying”, ladrones, empresarios ricos, el poder de la mafia -representada por musarañas-, el respeto entre especies o razas, la xenofobia o la discriminación.
En esta humanización del mundo animal tampoco faltan los teléfonos inteligentes, las redes sociales e incluso celebridades de la música pop como la gacela Gazelle (Shakira), que interpreta el tema principal del largometraje Try Everything.
La película, según Bush, habla de cosas que afectan “a todos” en las que los animales deben aprender a “superar los instintos básicos” para lograr la convivencia que caracteriza el largometraje.
En este sentido, los directores de Zootopia, Rich Moore y Byron Howard, admitieron ante el público que asistió al estreno que para esta película se inspiraron en “el legado de los clásicos Disney”, pero que querían hacer algo “diferente y original”.
Esta fue la teoría que también apoyó ante los medios el actor estadounidense Jason Bateman, que definió la cinta como un “choque de culturas donde cada animal puede representar alguna raza humana, religión o momento vital o personal de nuestra sociedad”.
Así, en Zootopia no existen los extremos blancos o negros. Los personajes son “grises”, complejos y su personalidad se desarrolla según sus vivencias, como ocurre en la realidad. “Puede que sea la película más compleja que Disney ha hecho nunca”, dijo el director Byron Howard.
De hecho, las 64 especies distintas que conviven en Zootopia son el resultado de más de 18 meses de investigación por parte de los productores, guionistas y directores para hacer una “fábula moderna” que el equipo espera se convierta en “una de las marcas del Disney del siglo XXI”.