La campaña de la oficina de AI en Bélgica llevaba por título “Tortura a un hombre y te dirá cualquier cosa” e incluía fotografías de personajes famosos como Iggy Pop o el Dalai Lama que, con retoques digitales, presentaban rostros ensangrentados por recibir una brutal paliza.
Tras ser sometido a esas ficticias torturas, el artista estadounidense llegaba a decir, como advertía el eslogan, “cualquier cosa” y acabó confesando que Justin Bieber es el “futuro del Rock&Roll”.
La organización humanitaria se ha visto obligada retirar esas imágenes y a pedirle disculpas, al tiempo que ha aclarado en un comunicado que Iggy Pop nunca ha dicho que Bieber sea el futuro del rock & roll.
“Aunque actuamos de buena fe, nos gustaría pedir perdón”, señaló AI en la nota, en la que también informa de que ha retirado la fotografía del líder espiritual tibetano porque ha “generado preocupación entre ciertos sectores”.
La organización defensora de los derechos humanos con sede en Londres aseguró que el objetivo de esa campaña era “tratar de influir” sobre la “concepción que tiene la gente sobre la tortura”, dado que un “sorprendente número de personas” cree que la “tortura es a veces útil”.
“Según algunas encuestas, más de un 36% de las personas cree incluso que la tortura está justificada en algunos casos. Esto es inaceptable e ilustramos esta realidad con el mensaje de que un hombre que es torturado dirá cualquier cosa”, denunció AI.