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Los procesados son Rolando Ezequiel Palacios (33) y Reinaldo Gamarra Irala (43), quienes enfrentan cargos por tentativa de homicidio doloso, resistencia, asociación criminal y transgresión de la Ley de Armas. La investigación contra los presuntos miembros de una banda criminal está a cargo del fiscal Carlos Antonio Almada.
Ambos están sindicados de integrar una banda delictiva que habría enfrentado a tiros a efectivos policiales durante una persecución ocurrida el 3 de febrero pasado, alrededor de las 11:00, en Ciudad del Este.
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Los datos indican que los ahora imputados, junto con otros desconocidos, circulaban en actitud sospechosa a bordo de una camioneta Jeep con placa AAKH811 en el microcentro de la ciudad. Al ser interceptados por agentes motorizados de la Policía Nacional en la avenida San Blas, los sospechosos embistieron a los efectivos para evitar ser verificados, lo que desencadenó una intensa persecución.
Durante su huida, los presuntos delincuentes habrían realizado disparos de arma de fuego contra los policías que los perseguían en motocicletas. A unos diez kilómetros, sobre la avenida José Félix Bogado y a unos 40 metros de la ruta PY02, los imputados descendieron de la camioneta y corrieron hacia un baldío para ocultarse.
Intentaron ocultar sus armas de fuego
En el trayecto, los sospechosos escondieron en un alcantarillado un fusil Colt calibre 5.56 mm y una pistola SF19 sin número de serie visible. Luego, presuntamente, continuaron realizando disparos contra los suboficiales Derlis Cabrera, Joel Rojas, Ronaldo Rodríguez y Jesús Díaz, quienes se vieron obligados a refugiarse detrás de vehículos y columnas del tendido eléctrico.
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Rolando Ezequiel Palacios llevaba consigo una pistola Glock calibre 9 milímetros, color negro, sin número visible y con selector de tiros, que intentó esconder al momento de ser rodeado y detenido por los policías, junto con su cómplice Reinaldo Gamarra Irala.
Mientras tanto, los otros sujetos no identificados ingresaron en una zona boscosa y lograron escapar. Finalmente, tras reunir diversos elementos incriminatorios, el fiscal Carlos Almada decidió imputar a los dos detenidos y solicitó la prisión preventiva, considerando la gravedad de los hechos investigados.
