Cargando...
Una de las instituciones afectadas es la Escuela Básica N° 6.812 de Puerto Flores, perteneciente a una comunidad indígena, donde la empresa Copacabana, de Teófilo Amarilla Silvero, entregó equipos de cocina usados y en muy mal estado.
Lea más: Villarrica: padres de familia exigen que se cambie a las cocineras del programa Hambre Cero
La falta de equipos en buen estado privó a los alumnos de recibir sus alimentos, tanto en el primer día como en la jornada de este martes, ya que la cocina entregada para la preparación de las comidas no funcionó, impidiendo la elaboración de los alimentos previstos.
La situación generó críticas e indignación considerando que esta comunidad es la que más necesita del programa, ya que la mayoría de estos niños indígenas viven en condiciones de extrema pobreza.
Las cinco escuelas de las comunidades indígenas de esta ciudad registran los mayores índices de deserción escolar de la ciudad, ya que muchos de los niños se ven obligados a abandonar sus hogares para mendigar en zonas urbanas en busca de alimentos.
En la Escuela Básica N° 1513 Jorge Rubén Peña, donde asisten 1.749 alumnos, la empresa Copacabana entregó el jueves los insumos perecederos que debían ser racionados para toda la semana, sin contar con la infraestructura adecuada para su conservación.
Debido a esta situación y a las altas temperaturas, frutas como piñas y bananas se descompusieron rápidamente y quedaron inservibles para el consumo.
Zacarías González Maciel, director de la escuela, explicó que presentaron los reclamos correspondientes y la empresa procedió a retirar las frutas y verduras en mal estado.
Lea también: Empezaron las clases entre escombros, sin kits escolares y con críticas a Hambre Cero
Asimismo, acordaron con los representantes de la empresa que el suministro de insumos se realice para un máximo de dos días, para tratar de prevenir que ocurra una situación similar.
Intervino la Contraloría
Enrique José Sosa, director del programa Hambre Cero de la Gobernación de Alto Paraná, informó que, tras las quejas de los directores, intervinieron este martes con la Contraloría General de la República (CGR) para investigar lo ocurrido.
Explicó que la empresa Copacabana argumentó que tuvo problemas con su proveedor, pero que los electrodomésticos ya fueron reemplazados por artefactos nuevos.
En cuanto a la calidad de los insumos, Sosa indicó que solicitó la reposición de los productos en mal estado. Además, recomendó que las entregas se realicen con un máximo de dos días de anticipación.
