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A cuatro días de la muerte del niño de ocho años, las autoridades sanitarias aún no han determinado la causa de la grave infección. El pequeño falleció la noche del domingo último, durante su traslado desde el Hospital Distrital de Presidente Franco a un sanatorio de Santa Rita.
La hermana del niño fallecido, una niña de 11 años, también fue hospitalizada por el mismo cuadro infeccioso. Inicialmente ingresó en el Hospital Distrital de Presidente Franco, luego fue derivada al Hospital Regional de Ciudad del Este y, posteriormente, a un sanatorio privado, donde permanece en estado delicado en una Unidad de Terapia Intensiva (UTI).
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Según datos proporcionados por los médicos, había una cama de UTI disponible en el Hospital de Niños Acosta Ñu, pero los familiares de la niña prefirieron evitar otro traslado de larga distancia. Ante esta situación, decidieron costear su internación en un sanatorio privado.
La directora de la Décima Región Sanitaria, Noelia Torres, explicó que el reporte recibido este jueves indica que la niña mostró una leve mejoría. No obstante, sigue delicada y en terapia, a la espera de los resultados de los análisis para determinar el origen de la infección.
“Está evolucionando bien la niña, estamos esperando el resultado del cultivo, que es donde se identificará el germen que afectó a estos niños y su familia”, expresó.
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Los análisis también incluyen pruebas de arbovirosis, meningitis y otras enfermedades causadas por bacterias. “Esa bacteria a veces se origina por una infección de garganta en los niños y, si no se realiza un tratamiento oportuno o rápido, puede contaminar completamente el cuerpo y provocar síntomas como los que presentaron estos niños”, explicó.
Intervención del Ministerio de Salud
Tras la muerte del niño de ocho años, el Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social (MSPBS) intervino en el Hospital Distrital de Presidente Franco, el Servicio de Emergencias Médicas Extrahospitalarias (SEME) y la Dirección de Terapias Intensivas.
Las intervenciones se llevaron a cabo a raíz de la denuncia de la sociedad de pediatras intensivistas sobre una presunta “mafia” que direcciona pacientes a ciertos sanatorios privados. Esto, considerando que el niño fue enviado a un centro asistencial ubicado a 75 kilómetros de distancia.
La doctora Torres señaló que, mediante la intervención, se podrá aclarar a la ciudadanía y a los propios padres del niño la actuación del personal de guardia. “Nosotros queremos que se aclare la situación para poder seguir trabajando. Desde Alto Paraná no tenemos ninguna injerencia en decidir a qué centro será derivado un paciente”, expresó.
Tanto ayer como hoy, el equipo de interventores se instaló en el Hospital Distrital de Presidente Franco. Entrevistaron al personal que estuvo de guardia cuando ocurrió el fallecimiento del niño, solicitaron el historial médico, entre otras diligencias.
