“La situación epidemiológica en España y Portugal aconseja el mantenimiento de medidas preventivas restrictivas de la movilidad en el interior del territorio y, en justa correspondencia, tras las debidas consultas con las autoridades portuguesas, se ha decidido mantener los controles en la frontera interior terrestre entre ambos países después de Semana Santa”, detalla la orden publicada en el Boletín Oficial del Estado.
Esta orden del Ministerio del Interior español señala que la prórroga “se considera una medida proporcionada a la gravedad de la situación y congruente con las adoptadas en el interior del territorio español”.
España tiene en vigor hasta el próximo 9 de abril una serie de medidas que limitan la movilidad interna con el objetivo de evitar desplazamientos no esenciales durante la celebración de la Semana Santa, en el marco del estado de alarma decretado en el país ante la pandemia de coronavirus.
El cierre de frontera fue establecido por España a finales del pasado enero y desde entonces se ha ido prorrogando, al igual que Portugal mantiene la misma medida.
El pasado jueves el primer ministro de Portugal, António Costa, manifestó que la frontera con España se mantendrá cerrada, sin avanzar una fecha para revertir la medida.
El cierre solo permite la entrada en España de ciudadanos españoles o residentes en el país en casos excepcionales por motivos como la reagrupación familiar, laborales, de estudios, de fuerza mayor, situación de necesidad o por humanitarios, entre otros, siempre debidamente acreditados.