“¡NO HABRÁ TERCER DEBATE!”, escribió Trump, que incluye el de junio contra el presidente Joe Biden y el del pasado martes con la vicepresidenta Harris.
Harris y Trump regresaron hoy a los estados más disputados de Estados Unidos, donde se decidirá el resultado de las elecciones, con la demócrata esperando aprovechar el impulso de su actuación en su primer debate presidencial.
La vicepresidenta realizará mitines consecutivos en Carolina del Norte mientras Trump viajará a Arizona, dos días después de que Harris llevara al expresidente republicano a ponerse a la defensiva en el primer enfrentamiento cara a cara de los dos candidatos en esta campaña.
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Pero aún no está claro si la contundente actuación de Harris, vista por 67 millones de espectadores en Estados Unidos, cambiará el rumbo en una carrera que todavía está reñida a menos de dos meses del final.
La campaña de Harris sostuvo que la candidata, de 59 años, entra en una fase “más agresiva” en su carrera por la Casa Blanca, “buscando capitalizar su victoria decisiva en el debate y aprovechar el impulso”.
Trump en Arizona
Trump subirá al escenario en Tucson, Arizona, en medio de informes de los medios sobre la agitación en su bando por la forma en que Harris logró desafiarlo en temas como el aborto y la política exterior.
El republicano, de 78 años, se centrará en la “economía en dificultades y el creciente costo de la vivienda”, informó su campaña, lo que indica un intento de lograr que se ciña a las preocupaciones electorales dominantes, en lugar de a su afición por las teorías conspirativas y los insultos.
En ambos casos, la elección de los estados indecisos para sus primeros mitines luego del debate refleja la necesidad de ganarse a grupos clave de votantes.