“Los expertos recuerdan a los Estados su obligación moral y legal de mantener la ley internacional y castigar a los crímenes de guerra, y señalan que la capacidad de aplicar esas órdenes de arresto descansa en los gobiernos”, indicaron en un comunicado conjunto.
El cumplimiento de las órdenes del 21 de noviembre "es crucial para superar la persistente impunidad, poniendo fin a graves crímenes en Israel y los territorios palestinos ocupados", subrayaron.
La decisión de la CPI, aseguraron, "es un histórico paso para la justicia y la rendición de cuentas", ya que la ausencia de éstas especialmente en Israel "ha sido un factor para el aumento de la insostenible violencia en la región".
Entre los firmantes del comunicado se encuentran los relatores de la ONU sobre ejecuciones extrajudiciales (Morris Tidball-Binz), contra el racismo (Ashwini K.P.), para lucha antiterrorista (Ben Saul) y sobre derechos humanos en Palestina (Francisca Albanese).
Los jueces del tribunal de La Haya también aprobaron la orden de arresto contra Mohammed Deif, un alto cargo de Hamas considerado jefe de su ala militar, aunque Israel ya lo declaró muerto en un ataque israelí el pasado junio contra la Franja, sin que se haya podido confirmar este fallecimiento por ahora.