Dekel-Chen fue liberado el pasado 15 de febrero y Ben-Ami una semana antes en las diferentes entregas que ha ido realizado Hamás desde el pasado 19 de enero, cuando comenzó la tregua en Gaza, a cambio de la liberación de presos palestinos por parte de Israel.
“Ha sido necesario aplicar una gran presión sobre los monstruos de Hamás para que se produjera la liberación, dado que Hamás había exigido liberar solo un número reducido de rehenes vivos”, trasladó el mandatario israelí en las conversaciones telefónicas.
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En la llamada, Netanyahu también les preguntó por su proceso de readaptación tras ser liberados por las milicias palestinas y les aseguró que “todos los ciudadanos de Israel están contentos” por su regreso.
"Seguiré trabajando por el regreso de todos nuestro rehenes, tanto los vivos como los muertos", concluyó.
Este domingo Hamás advirtió de que no retomará las negociaciones con Israel para la segunda fase de alto el fuego hasta que no libere los más de 600 presos palestinos que tendrían que haber sido puestos en libertad este sábado después de que entregaran a la Cruz Roja a seis rehenes, tal y como estipula el acuerdo de alto el fuego.
Esta decisión del grupo palestino pone en peligro la nueva ronda de conversaciones que debería haber empezado ya para zanjar la segunda fase de este acuerdo que permitiría la salida de los más de 60 rehenes que siguen en manos de Hamás.
