“Vemos con preocupación los intentos por apresar de nuevo a José Rubén Zamora (…) se trata de un caso espurio en su contra y esto evidencia las estrategias de criminalización del Ministerio Público”, indicó el mandatario durante una rueda de prensa este lunes en el Palacio de la Cultura (Sede de Gobierno).
Arévalo de León agregó que la persecución contra Zamora Marroquín es una amenaza contra el pueblo de Guatemala debido a que “se sufre la continuación de la manipulación de la justicia contra personas que defienden la decencia del país”.
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Las palabras del presidente se dan a pocas horas de que el periodista, de 67 años, acuda a una nueva audiencia donde un juez penal debe decidir si acepta la petición de una sala de Apelaciones y de la Fiscalía Especial contra la Impunidad (FECI) de revocarle el arresto domiciliario con el que fue beneficiado en octubre del año pasado.
Rubén Zamora Marroquín, quien tiene una trayectoria periodística de tres décadas denunciando corrupción, se encuentra bajo proceso penal desde el 29 de julio de 2022, cuando fue detenido en su hogar y permaneció preso en una cárcel del norte de la Ciudad de Guatemala durante 819 días.
La detención del periodista, que fue acusado de lavado de dinero, fue ejecutada por fiscales que se encuentran sancionados por el Departamento de Estado de los Estados Unidos por actos de corrupción.
“Hacemos un llamado al sistema de justicia para que busquen retomar una senda clara de compromiso con los derechos humanos y la imparcialidad”, concluyó Arévalo de León durante su intervención.
El pasado viernes, la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) rechazó el posible regreso a prisión de Zamora Marroquín en Guatemala y señaló que durante el proceso en su contra se han cometido violaciones a su derecho de defensa.