Arturo Sosa convocó a los medios para hablar de Francisco, que fue el primer papa jesuita. Y sobre él, aseguró: “Su profunda motivación en la vida fue poner en práctica la voluntad de Dios, es decir, contribuir a la transformación de la humanidad para hacer de este mundo una casa digna para todos los seres humanos”.
“No buscó agradar a todo el mundo ni medir sus actuaciones por algún índice de popularidad. Asimilando el evangelio de Jesús y sacando conclusiones de la historia de hombres y mujeres de Dios convirtiéndose en profetas, santos o santas, sabía que sus actuaciones y decisiones no serían del agrado de todos”, explicó el superior de los jesuitas.
Según Sosa, fue “un hombre que supo adquirir la mirada misericordiosa de Dios sobre la complejidad humana y entregó su vida para abrir mayores espacios de vida común”.
El superior de la Compañía de Jesús no quiso hablar de quién podría ser el nuevo papa: “El cónclave se reúne para elegir al sucesor de Pedro, no al sucesor de Francisco. Cada papa es elegido para calzar las ’sandalias del pescador’ al que Jesús puso al frente de la comunidad de sus seguidores”.
Destacó que “la Compañía de Jesús nació para servir la misión de la Iglesia bajo la dirección directa del papa” y que “los jesuitas hacen un voto de obediencia al papa acerca de la misión a realizar”.
“Apenas sea elegido el nuevo papa nos pondremos a su disposición como hemos hecho durante más de 450 años”, concluyó.