Tras el partido por la eliminatoria sudamericana, la Selección Nacional de Bolivia, que perdió 2-0 ante Venezuela, tuvo que volver al hotel de concentración luego de que las autoridades venezolanas no dejaran que despegue el avión. El problema se registró en el aeropuerto internacional José Tadeo Monagas de Maturín.
El encargado de seguridad y logística de la selección, Harold Howard, calificó el hecho como un boicot. “Esto es un sabotaje hacia la selección boliviana, vamos a regresar y vamos a ver”, declaró a medios de prensa que acompañaron el partido en Venezuela.
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Consultado con respecto al motivo de la cancelación del vuelo, indicó que solo les alegaron mucho tráfico aéreo.
“Dicen que hay mucho tráfico aéreo cuando hay dos aviones aterrizando y nada más volando acá. No sé si habrá mala intención, no lo sé”, expresó para El Deber Sports, un medio de prensa de Bolivia.
La Federación Boliviana de Fútbol aseguró que el plantel contaba con toda la documentación y los permisos necesarios para retornar, pero el gobierno de Nicolás Maduro impidió el despegue.
El equipo y toda la delegación aguardó durante varias horas en el aeropuerto, pero como no tuvieron respuesta favorable, tuvieron que volver al hotel para descansar.
Afirman que ya sabía que serían retenidos
El director técnico, Oscar Villegas, advirtió que la situación no los tomó por sorpresa. “Ya lo sabíamos. Hablamos con el ministro de Gobierno hace una semana y le pedimos que dialogara con el gobierno de Venezuela para que nos dejen salir”, señaló.
La comunidad deportiva y política boliviana elevó nuevos pedidos a las autoridades nacionales, reclamando intervención inmediata y respuestas frente al accionar del régimen venezolano.
La Federación Boliviana de Fútbol informó que en la mañana de este sábado la delegación seguía varada porque las autoridades aeroportuarias de la dictadura no autorizaban el despegue del avión.
El vuelo debía llegar a La Paz cerca de las 05.00 (hora local), pero la negativa venezolana arruinó la logística y desgastó físicamente al plantel, que tenía planificado entrenar esta misma tarde de cara al partido del martes con Chile en El Alto.
Los periodistas que acompañan a la delegación también están con mucha incertidumbre.